El ministro destacó que los hospitales de la provincia funcionan en todo el territorio, así como sus consultorios externos, imágenes, laboratorio, internación, quirófanos, servicios de urgencia, etc y no hay falta de insumos ni de medicamentos. “Todo esto, a pesar de presión que ejercen algunos dirigentes de ese gremio, las convocatorias a asambleas y las medidas de fuerza que realizan algunos agentes”, dijo.
En el mismo sentido, Delfino dijo que “se pretende instalar un clima de crisis apuntando hasta contra los propios trabajadores. En un absurdo incompresible, ATE los responsabiliza hasta por tomarse vacaciones”.
Por otro lado, explicó que “trabajamos con una visión de conjunto ordenada a la acción y conducido por el Consejo Provincial de Salud Pública que desarrolla un modelo que se planifica, se ordena a la justicia social y se construye permanentemente”.
“Es la necesidad de nuestro pueblo de tener más y mejor salud la que nos impone el esfuerzo cotidiano de nuestra tarea. Todos los programas de promoción y prevención de salud operan en el territorio rionegrino. Salimos de la constante histórica del lamento, la frustración, y los negociados. Los centros de salud y los hospitales atienden las necesidades de nuestra gente en forma habitual y efectiva”, argumenta el Ministro.
Asimismo, Delfino indica que “nuestro personal hace posible que el sistema funcione. Por ello nuestro Gobierno llevó a cabo las mayores mejoras en los ingresos de nuestros trabajadores. Se han producido mejoras significativas en la legislación para residentes en salud, técnicos y profesionales. Asimismo se han recompuesto adicionales en todos los agrupamientos y se establecieron incentivos para la radicación de médicos en localidades prioritarias”, sumando una inversión provincial de 2,5 millones de pesos mensuales a favor de los trabajadores hospitalarios.
El ministro definió al actual “gobierno de la salud” como “una gestión austera y con un fuerte sesgo por la eficiencia”. “Nos imponemos cuidar los costos, porque ellos significan el esfuerzo de todos los rionegrinos que pagan sus impuestos. Se realizan licitaciones, se fortalece la auditoría médica, el sistema de derivaciones, la compra centralizada de medicamentos oncológicos, de alto costo y de prótesis”, agregó.
También destacó la impronta política de “hacer frente a cada situación problemática, como nos pide el Gobernador en todo momento: en cada lugar, siempre, recorriendo toda la provincia, atendiendo lo urgente, asegurando canalizar cada requerimiento, cada petición”.
Finalmente, Delfino expresó que “sabemos que aún hay mucho camino por andar y muchos temas por resolver. No serán la arrogancia ni la mentira nuestro modo”.
Cabe señalar que el sistema de Salud Pública de Río Negro atiende alrededor de 1.750.000 consultas anuales entre los servicios de Guardia, consultorios externos y centros de salud; más de 47 mil internaciones en las camas de los hospitales y alrededor de 11 mil partos, garantizando cobertura universal a las madres de nuestro territorio. También se brindan más de 2 millones de prestaciones de laboratorio, más de 300 mil diagnósticos por imágenes y se realizan alrededor de 13 mil cirugías anuales.

El comunicado de ATE, al que respondió el ministro:

Desde la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) y teniendo como base la información y datos proporcionados por los propios trabajadores de distintos nosocomios y centros de salud de la provincia, se elabora un "sintético informe" que tiene la finalidad de reflejar la grave y crítica situación que atraviesan hoy la mayoría de los hospitales rionegrinos.

A partir de la ausencia de políticas públicas, falta de inversión presupuestaria y las medidas de fuerza gremiales los hospitales de la provincia se encuentran frente a un crítico panorama, que impacta directamente sobre las franjas sociales más vulnerables de la comunidad y de menores ingresos, ya que son éstas, las verdaderas usuarias del sitema público de salud.

Se sigue sosteniendo en Río Negro un modelo de atención que se centra en la enfermedad, contrariamente a la "promoción", "prevención" y "cuidado" de la salud.
La hegemonía del modelo médico, tiene un enfoque netamente biologista en la provincia, carente de contextualización histórico-social, fragmentado, sin trabajo en equipos y tendiente a la hiperespecialización.
No se ha tenido desde el Estado hasta el momento un abordaje epidemiológico de los problemas de la salud, ni sobre la articulación con otros sectores y tampoco se han fortalecido los trabajos en redes.

En este contexto "la dignificación" de los trabajadores se vuelve imprescindible, en un sector que, aunque incorpore mas tecnología, la atención de la salud no puede ser reemplazada por ninguna máquina o aparato y la relación humana es fundamental.

En este escenario ATE desarrolla un plan de lucha, que además comprende al resto de los sectores de la administración pública provincial.
Los trabajadores de la salud pública se han caracterizado por sostener con entusiasmo, dedicación y compromiso el sistema de salud.

En este momento en la mayoría de los hospitales se garantiza solamente la atención de urgencias y emergencias. Además hay que señalar, que más del 50 por ciento del personal se encuentra de licencia a partir de las vacaciones.

El presente informe refiere a los hospitales del Alto Valle Oeste (Catriel, Villa Manzano, Cinco Saltos, Cipolletti y Fernandez Oro). Los del Alto Valle Este (Chichinales, Villa Regina, Ingeniero Huergo, Cervantes, General Roca y Allen). Los de la Zona Cordillerana (El Bolsón, Bariloche, Pilcanilleu y Comallo), los de la Zona Atlántica ( Sierra Grande, San Antonio Oeste, Conesa, Río Colorado y Conesa) y los del Valle Medio ( Choele Choel, Lamarque, Beltrán, Chimpay).

Detalle actual de las prestaciones:

- Las actividades programadas para las áreas sanitarias se encuentra paralizadas en el 1 Nivel de Atención en los centros de salud.
- La atención de consultorios externos en un 100 por ciento también paralizadas.
- La mayoría de los centros de atención primaria en los barrios se encuentran cerrados. Razón por la cual todas las actividades programadas para las áreas locales se encuentran suspendidas.
- Las cirugías programadas de todas las especialidades suspendidas.
- Los servicios de apoyo técnico-auxiliares, como las prestaciones de rayos, laboratorio, bacteriología, hemoterapia, controles de niños sanos y vacunación, también suspendidas en la mayoría de los hospitales.
- Falta de insumos en todos los centros de salud, sueros, alimentos y medicamentos básicos como ibuprofeno.

Desde ATE se sostiene que es imprescindible recuperar un Estado que asegure políticas sociales universales, que apunten al urgente desarrollo de las condiciones de vida de la población, a la vez que incorpore a su gestión, modalidades de participación social activas y efectivas, que incluyan a los trabajadores.
Se necesitan políticas de salud y sociales que den respuestas a problemas estructurales de nuestra comunidad. Es decir políticas de empleo, de salarios y de inclusión social.

Al cumplirse 30 años de democracia la salud de todo el pueblo rionegrino es una deuda estatal pendiente.