Según la propuesta éste órgano será de carácter unipersonal e independiente, con autonomía funcional administrativa, que no recibirá órdenes de ninguna autoridad.

El principal objetivo será la defensa, protección y promoción de los derechos e intereses legítimos individuales y colectivos consagrados tanto por la Constitución Nacional como por la Constitución Provincial, respecto de los ciudadanos del Municipio de Viedma.

Asimismo, el Defensor del Pueblo -en calidad de órgano intermediario- podrá en sus funciones, supervisar la actividad administrativa del Departamento Ejecutivo Municipal, como también el accionar de concesionarios, contratistas y prestadores de obras de servicios públicos y permisionarios de uso de bienes de dominio municipal, en circunstancias que se observen arbitrariedades, deficiencias, abusos, negligencias, demoras administrativas innecesarias, irregularidades y toda otra forma de menoscabo que afecte la vida de la ciudadanía.

Se propone que dicho órgano sea designado por el Honorable Concejo Deliberante, en sesión especial convocada para tal fin, por el voto de las dos terceras partes, cumpliendo funciones por el término de 5 años, pudiendo ser reelegido una sola vez en forma consecutiva.

Para tal fin, el Defensor designado deberá cumplir con ciertos requisitos. Algunos de ellos son: ser argentino nativo por opción o naturalizado, tener un mínimo de 30 años de edad, tener residencia mínima de 5 años en la ciudad de Viedma, no poseer antecedentes penales ni sanciones administrativas y no participar de otra función pública, profesión dentro del partido de Viedma, salvo la docencia.
 
Montecino Odarda afirmó que “el proyecto tiene sobre todo la intención de atender, observar y hacer respetar los derechos de la ciudadanía en el marco del respeto y calidad de vida que se merecen nuestros vecinos”.