El hecho ocurrió el 23 de enero en las calles 16 y 25 del barrio Lavalle, cuando un hombre que circulaba en moto comenzó a pedir ayuda porque su hijo no podía respirar. Ante tal situación, Margiotta y Millacoy se acercaron y asistieron rápido al chico, quien se hallaba con fiebre y convulsiones. Después de realizar las maniobras que le permitieron al niño reponerse, fue trasladado urgente en un patrullero al hospital Artémides Zatti.

“Un policía siempre será una persona que reunirá en su condición de servidor público esa síntesis de lo que el Estado debe garantizar a la comunidad y al pueblo, una actitud siempre de servicio para estar atento a aquello que nuestros ciudadanos puedan estar requiriéndonos en diferentes situaciones y en distintos lugares”, resaltó Montecino Odarda impulsor de la medida.

Asimismo, el presidente del Bloque Frente Progresista destacó que “estos hombres en su investidura de servidores públicos fueron más allá del cumplimiento del deber ya que en un acto de despojo y solidaridad se brindaron para salvar la vida del niño. Gestos como estos enaltecen a la institución policial en general”.
“Estos actos deben ser destacados y tomados como referencia en nuestro actuar cotidiano, ya que reflejan la dualidad valor-acción, de aquellos quienes pragmáticamente influyen y nos recuerdan los valores más trascendentales del hombre en comunidad. Actitudes como la responsabilidad y el compromiso ciudadano, sin exclusión ni preferencias, donde el interés general prevalece sobre el particular, respaldados en accionar coherente, son aquellas que nos permiten construir una sociedad más justa, más solidaria y más responsable”, finalizó.