Pichetto reconoció que la provincia atraviesa "problemas estructurales" y que es un distrito "endeudado", ya que mantiene "una deuda con la Nación de cerca de 4 mil millones de pesos".
Explicó a Télam que "la Presidenta ha prorrogado por dos años más el vencimiento de los intereses de esta deuda, con lo cual ha alivianado mucho esta situación", ya que se dejarán "de pagar en estos dos años cerca de 660 millones", y eso servirá para "una gran oxigenación".
Ratificó que se darán de baja "unos 3.500 o 4.000 contratos" en la administración pública, con excepción de "aquellos que sean necesarios para la continuidad de los servicios públicos" y explicó que esto forma parte del objetivo de reducir "la superpoblación de empleo público".
"Río Negro es una provincia deficitaria; por eso se ha comenzado una reducción de personal que estaba contratado, que no forma parte de la planta permanente y que tiene como finalidad ordenar los números y la cuestión fiscal", agregó.
Para el senador, la idea es "ir buscando un modelo fiscal que sea autosuficiente" para que "la provincia pueda, con sus propios recursos de coparticipación, fondo sojero y lo que producen las regalías del petróleo -que es otro de los temas pendientes que hay que renegociar con empresas-, pagar los salarios de los trabajadores y hacer una gestión de servicios públicos que sea buena y razonable en educación, en salud y en seguridad". (TELAM)
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Pichetto confirmó la baja de entre 3.500 y 4.000 contratados
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