El presidente del Bloque de Legisladores del FPV, Alejandro Marinao, manifestó en referencia a los acuerdos entre el gobierno provincial y el Nacional: “es alarmante el nivel de compromiso que el gobernador Weretilneck tiene con el ajuste que impone el gobierno nacional con sus políticas de déficit cero, que solo representan desempleo, miseria y violencia para todos los argentinos”, aseguró

“El único plan que le importa al gobierno nacional y que cuenta con el apoyo del gobernador, es cumplir las pautas de ajuste, hambre y miseria que impone el Fondo Monetario Internacional”.

“Alberto Weretilneck acata lo que el presidente Mauricio Macri le dice. Si hay que ajustar, aún a costo del sufrimiento del pueblo rionegrino, él da su aval, luego sonríe para las cámaras y habla de consenso político y democracia”.

“Pero no reclama la quita del fondo sojero ni una compensación para poder continuar con la obra pública que genera empleo para los rionegrinos. Tampoco hace lo propio con la transferencia del presupuesto recortado a la educación hacia las fuerzas represivas. Ni que hablar sobre la quita del subsidio al transporte que terminará impactando en el bolsillo de los usuarios con aumentos desmedidos”.

“La quita del subsidio al transporte por parte del gobierno nacional es un golpe al corazón de las familias trabajadoras porque precisamente es hacia el precio del boleto de colectivo, principalmente, a donde se traslada esa medida”.

“Para la provincia de Río Negro, representa entre 25 y 30 millones de pesos por mes el subsidio al transporte público urbano e interurbano. Una suma irrisoria para un gobierno que paga mas del doble en publicidad de gestión y consultorías”.

“No querer cubrir ese subsidio para evitar que el precio del boleto se pueda duplicar, parece por lo menos una medida de insensibilidad hacia los rionegrinos, trabajadores, desempleados, jubilados, estudiantes que ya han sido golpeados duramente en los últimos dos años con la pérdida del poder adquisitivo”.

Por último aseguró que, “este es un impuestazo más para el que menos tiene, como lo son también las desproporcionadas tarifas de luz y gas”.