La Universidad Nacional del Comahue (UNCO) no comenzará las clases del segundo cuatrimestre como estaba previsto para la próxima semana, debido a una medida de fuerza convocada por docentes y no docentes. La decisión responde a la crítica situación económica de la institución, agravada este año por un presupuesto insuficiente para mantener el servicio y mejorar los salarios del personal.
María Julia Barsotelli, secretaria general de la Asociación del Personal No Docente de la UNCO (APUNC), expresó en una conferencia de prensa que la situación empeoró desde la última gran marcha en abril. "El presupuesto universitario sigue igual de paupérrimo y los salarios de los trabajadores continúan siendo insuficientes", afirmó Barsotelli, subrayando que la mitad del personal no docente está por debajo de la línea de pobreza.
Barsotelli detalló que muchos trabajadores no pueden cubrir necesidades básicas como alquiler, alimentación, transporte y servicios esenciales debido a los altos costos y tarifas. Algunos recurren sistemáticamente al uso de tarjetas de crédito para posponer pagos, una situación que considera una forma de hostigamiento por parte del Gobierno Nacional hacia la educación pública.
La medida de fuerza también se enmarca en un contexto más amplio de recortes presupuestarios que llevaron a la UNCO a enfrentar dificultades como la cesación de pagos para servicios básicos como luz, gas y limpieza. En respuesta, la comunidad universitaria organizó manifestaciones masivas en abril y mayo, obteniendo apoyo significativo en Neuquén y otras localidades.
Silvia Brouchoud, secretaria general de ADUNC, y Beatriz Gentile, rectora de la UNCO, denunciaron la falta de acción efectiva por parte del Gobierno. Gentile indicó que, a pesar de las promesas de equiparar el presupuesto de la UNCO con el de la UBA, la situación sigue sin cambios significativos.
Los sindicatos y la comunidad universitaria continúan demandando paritarias libres y salarios dignos, advirtiendo que persistirán en las movilizaciones hasta que se revierta la situación. La decisión de no iniciar el segundo cuatrimestre refleja el impacto profundo de la crisis económica en la educación superior y la necesidad urgente de una solución adecuada.
31 octubre 2024
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