Polémica por libros de ESI: "No es cuestión de prohibir, pero tampoco de imponer lecturas"

La senadora Mónica Silva abogó por una implementación cuidadosa de la ESI y advirtió contra la “sobreactuación” de ciertos contenidos en las escuelas

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La inclusión de libros del catálogo “Identidades bonaerenses” en 2.350 escuelas secundarias y 443 escuelas secundarias técnicas bonaerenses disparó una polémica en torno al uso de estos textos para enseñar Educación Sexual Integral (ESI). Grupos de legisladores y padres cuestionaron la pertinencia de ciertos contenidos destinados a adolescentes, en un debate que alcanzó el Senado de la Nación. La senadora por Río Negro, Mónica Silva (Juntos Somos Río Negro), se pronunció al respecto, apoyando la ESI en general, pero advirtiendo que es crucial preservar la sensibilidad de estudiantes y familias.

Silva enfatizó la importancia de la ESI para abordar temas que históricamente fueron desatendidos en la educación formal. "La ley dispone que todos los estudiantes, en escuelas públicas y privadas, reciban educación sexual integral, y ese mandato es positivo en muchos aspectos", afirmó Silva. 

“La implementación de la ESI en las escuelas es positiva, especialmente en Río Negro, donde el programa se extendió de manera generalizada y cuidadosa”, afirmó la senadora. Explicó que el trabajo se realiza respetando la individualidad de cada estudiante y tomando en cuenta la sensibilidad que estos temas pueden generar en las familias. “La intención nunca es herir la sensibilidad de los niños y niñas, sino brindarles información clara y necesaria sobre la sexualidad humana, de modo que comprendan el respeto que deben tener hacia su propio cuerpo y el de los demás”, añadió.

Silva explicó que en la Cámara Alta, legisladores y funcionarios de La Libertad Avanza criticaron la selección de ciertos libros adquiridos por la provincia de Buenos Aires pero, según Silva, esta discusión fue promovida sin un debate amplio y con una perspectiva parcial. “No se nos invitó a los demás senadores y senadoras, lo que evidencia una reunión de tono partidario”, comentó, en referencia a las críticas que calificó de “arbitrarias”.

La senadora consideró que es fundamental mantener una postura equilibrada en la implementación de la ESI y evitar "sobreactuar" los contenidos, lo cual, en su opinión, puede llevar a que algunas familias rechacen el programa por percepciones erróneas o temores infundados. Según la senadora, "no hay que forzar situaciones", y la enseñanza debe centrarse en "acompañar la curiosidad y necesidades de saber de los chicos", en lugar de imponer temas que reflejan preocupaciones adultas.

Al referirse al contexto bibliográfico, Silva indicó que no se opone a la disponibilidad de materiales en las bibliotecas escolares para acceso de docentes y personal, pero enfatizó que su inclusión directa en el aula debe considerarse con cautela. "No es cuestión de prohibir, pero tampoco de imponer lecturas que puedan herir la sensibilidad de los estudiantes", afirmó, subrayando que el acceso a ciertos contenidos debe ser voluntario y no una imposición en el currículo escolar.

Finalmente, la senadora también abordó el impacto de la autoidentificación de género en ciertos espacios de convivencia, señalando casos en los que se registraron abusos debido a una interpretación amplia de los derechos identitarios. Según Silva, "el sentido común debe prevalecer" para asegurar una convivencia respetuosa y justa.

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