Viedma avanza con una medida para fortalecer su parque industrial mediante la aprobación de una ley que ofrece beneficios impositivos similares a los que tiene el partido de Patagones. Esta ley, que ya fue aprobada, tiene como objetivo corregir una inequidad histórica en la región y atraer más inversores, especialmente aquellos interesados en radicar sus empresas en el parque industrial local. El principal incentivo es la eximisión del pago de ingresos brutos, un beneficio que, según las autoridades, impactará positivamente en la competitividad del sector.
La ley establece que las empresas que se radiquen en el parque industrial de Viedma podrán acceder a la eximisión del pago de ingresos brutos por un periodo determinado, aunque la reglamentación de la ley aún está en proceso. De acuerdo a lo manifestado a este medio por Marco Magnanelli, secretario de Desarrollo Económico, Producción y Turismo de la ciudad, la exención se aplicará por un lapso de 10 años, siempre y cuando las empresas presenten un plan de inversión que garantice la viabilidad de los nuevos proyectos. Este tipo de incentivos fiscales ya ha demostrado ser efectivo en otros lugares, como el partido de Patagones, donde la exención impositiva fue un factor clave para atraer empresas.
Sin embargo, la implementación de esta ley no está exenta de complejidades. En primer lugar, la reglamentación deberá definir los rubros específicos que se beneficiarán de la eximisión. Según Magnanelli, algunos emprendimientos que no están directamente relacionados con actividades productivas, como comercios o actividades logísticas, no podrán acceder a este beneficio. La tarea ahora es precisar cuáles son los sectores que realmente contribuyen al proceso productivo y de transformación en el parque industrial.
El parque industrial de Viedma ha sufrido, con el paso de los años, la presencia de emprendimientos no directamente ligados a la producción. Algunos ejemplos incluyen un negocio de confitería y departamentos en alquiler, que si bien forman parte de la actividad económica, no tienen un impacto directo en el desarrollo industrial. Las autoridades están trabajando para evitar que esos rubros aprovechen la exención de ingresos brutos, un aspecto clave que se está considerando en la reglamentación de la ley.
Respecto a las empresas ya radicadas, Magnanelli explicó que no será necesario presentar un nuevo plan de inversión para acceder a los beneficios fiscales, ya que estas empresas han demostrado su viabilidad con el tiempo. No obstante, deberán cumplir con los requisitos generales de la ley para seguir gozando de la eximisión de ingresos brutos. La reglamentación también incluirá un proceso de inscripción para los nuevos emprendimientos que deseen radicarse en el parque industrial, estableciendo un marco de transparencia y control sobre los proyectos que recibirán los beneficios fiscales.
El impacto de esta ley también se extiende a los incentivos municipales. Desde la gestión del exintendente Pedro Pesatti y ahora con Marcos Castro, se han eliminado las tasas de apertura para la creación de empresas en la ciudad. Este beneficio se suma a las exenciones impositivas provinciales, lo que convierte a Viedma en un destino atractivo para nuevos inversores, especialmente en un contexto económico desafiante donde los costos fiscales son un factor determinante para muchas empresas.
La reglamentación de la ley está prevista para ser finalizada en los próximos 60 días, lo que permitirá comenzar con la implementación de los beneficios fiscales. A partir de entonces, se abrirá un proceso para promover la radicación de nuevas empresas, y las autoridades locales planean utilizar esta herramienta como un motor para el desarrollo económico de la ciudad, invitando a empresas de todo el país a considerar a Viedma como un destino viable para nuevas inversiones.
23 diciembre 2024
Viedma