Si bien Víctor Sodero Nievas ya había mantenido varias reuniones con el sindicato judicial, era la primera vez que Enrique Mansilla y Sergio Barotto se encontraban cara a cara con la dirigencia.

Estela Quisles, titular de STRAJUR, remarcó que fueron varios los temas analizados. La reunión giró entorno a temas como el 82% móvil, situaciones de violencia laboral que fueron planteadas por el gremio y el cumplimiento del cupo para las personas con capacidades diferentes, entre otras problemáticas.

Principalmente, se planteó a los jueces la necesidad de “darle cumplimiento al acuerdo de recomposición salarial que se firmó, el año pasado que hasta la fecha se cumplió en forma parcial”, dijo Quisles.

“No tuvimos respuestas concretas sobre nada”, dijo la líder sindical, aunque adelantó que “en el campo de la recomposición salarial, aparentemente desde el STJ hay un pedido de audiencia con el gobernador (Alberto Weretilneck) para tratar todos los problemas del Poder Judicial, entre ellos el cumplimiento del acuerdo”.

De todas formas, Quisles admitió que “no iba a ser posible tener respuestas porque son temas complicados para este momento que se vive” y destacó que hubo “buena predisposición de los jueces para dialogar y trabajar en soluciones”.

“La sensación es que los jueces tienen metas para alcanzar y tienen una percepción acabada de la problemática en el Poder Judicial. Nosotros les dijimos que esta Justicia era una de las mejores del país, pero se ha ido deteriorando hacia fuera y hacia adentro”, dijo.

Agregó que “el anhelo de los jueces es devolver credibilidad e institucionalidad, y mejorar hacia adentro todo lo que se pueda”.

Finalmente, señaló que otro gran problema a tratar en futuras reuniones tiene que ver la falta de recurso humano. “Hay que dotar al Poder Judicial de la cantidad de empleados que necesita, porque hay organismos en emergencia por la falta de personal y se lo hicimos saber”, señaló Quisles.