Desde Viedma autorizan la utilización de un vientre sustituto

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Un fallo de un juzgado de Familia de Viedma podría sentar jurisprudencia para facilitar a las parejas del mismo sexo la posibilidad de ser padres biológicos de sus propios hijos. 
Hasta ahora, la posibilidad más manifiesta de las parejas compuestas por dos hombres era la adopción, o utilizar vientres con la posibilidad que la mamá, aportante del vientre, reclame su parte. 
El juzgado de la doctora María Laura Dumpe, autorizó el pasado día viernes el requerimiento de una pareja de personas del mismo sexo que planteaba la realización de una fecundación in vitro, solicitando permiso para realizar una transferencia,  tomando un óvulo del banco anónimo de un instituto, y aportando material genético de uno de los hombres de la pareja. 
 Explicó la jueza que "la fecundación se realiza fuera del vientre y luego se hace una transferencia al vientre de una amiga de la pareja, que pasa a tener el nombre de "gestante"". 
"Lo que tiene esto de novedoso es que ellos piden en la misma demanda, que al momento del nacimiento se haga unas planillas, que son requisitos esenciales en los nacimientos, que siempre llevan la huella digital plantal de la criatura y la huella dactilar de la mamá, y esto acredita el nacimiento y la vinculación entre ambos; pero ahora no va a llevar la huella de la mamá sino que va a llevar la huella del padre que aportó el material genético", dijo. 
Agregó: "De esta manera lo que se hace es desplazar a la gestante que tampoco es la mamá, va directamente con la huella del papá que al momento de inscribir en el Registro Civil, será con el nombre de ellos dos". 
La jueza aclaró que con este fallo desplaza la figura de la madre, no tendrá posibilidad en el futuro de reclamar, además la criatura no tendrá ningún dato genético de ella.
Antes de resolver la cuestión, mantuvo contacto con comités de bioética, para establecer fehacientemente si la gestante es consciente de la decisión que toma. 
 Con esta resolución, la feliz pareja comenzar a las intervenciones correspondientes para lograr la llegada de un hijo biológico. 
Explicó además que su fallo se sustenta en la certeza que no habrá, como recompensa de habilitar el vientre, beneficios económicos. 
Si en cambio hubiesen existido cuestiones lucrativas,  la resolución hubiese sido contraria a la que finalmente se dictó el pasado día viernes. 
Aclaró que "no podemos aceptar algo que va contra los principios". 

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