Tras el asesinato de Jorge Gabriel Rolando Vera, ocurrido el pasado sábado en el marco de un enfrentamiento entre vecinos del barrio Zatti, crece la tensión en el lugar del hecho. Se teme que haya represalias sobre la familia del agresor, Mario Andrés Huichaqueo, empleado del Servicio Penitenciario Provincial que fue imputado y detenido por el homicidio del joven. 

El acusado tiene 36 años, trabaja en el Complejo Penal 1 de Viedma y le formularon cargos  por "abuso de arma en concurso real con homicidio agravado por el uso de arma de fuego".

Su familia, que reside en el barrio donde ocurrieron los hechos, habría sido traslada a un lugar seguro, por temor a represalias que podrían tomar los amigos de Vera que participaron de enfrentamientos con la policía, en forma previa y posterior al homicidio.

Los rumores de una venganza circularon con fuerza ayer y esta mañana, al igual que las expresiones de dolor ante la muerte del joven, conocido en el barrio como “Wachín”.  Vecinos del lugar, que conocen a ambas familias -la del agresor y la de la víctima- relataron a este medio que "tienen miedo por lo que pueda pasar", ante la posibilidad de otros enfrentamientos que deriven de este asesinato. 

Integrantes de organizaciones comunitarias en las que participaba el fallecido, manifestaron su profundo malestar y repudiaron el homicidio. Contaron que "Jorge había dejado la Escuela Primaria en 4° o 5° grado y tenía una hija de 1 año y cuatro meses. Trabajaba de albañil y participaba de los talleres de promoción y prevención del Galpón Amarillo, dependiente de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF)". 

"Nuestros corazones no encuentran consuelo ante los últimos hechos sucedidos en el querido barrio IPPV. Porque forzosa e injustamente se arrebató la vida de un integrante de la familia del Galpón Amarillo", publicaron en Facebook.

El contexto en que se produjo el asesinato

Los hechos que rodearon el asesinato de Vera comenzaron pasadas las 3.30 del sábado, cuando César Burgos, de 23 años, fue detenido por un robo ocurrido en la vía pública. En ese momento, el joven estaba junto al fallecido y otras personas, en la plaza de Juan Manuel de Rosas, entre Estomba y Lamadrid. También, previo al homicidio, se habría producido un robo en la despensa de la madre del imputado.

De acuerdo a lo informado por el Ministerio Público Fiscal, entre las 4 y las 4.30 horas, Huichaqueo descendió de su Chevrolet Corsa portando su arma reglamentaria (una pistola semiautomática 9 mm) y efectuó al menos tres disparos hacia el grupo de jóvenes que estaba en la mencionada plaza.

Cuando se retiraba hacia la casa de su madre, ubicada a tres cuadras, fue cuando volvió a encontrarse con Vera, que había ido detrás de él. En esa oportunidad, Huichaqueo efectuó, al menos, otros 7 disparos, mientras el joven huía hacia la calle Liniers donde se desvaneció.

La autopsia que se realizó al cuerpo indica que el disparo ingresó a la altura de la novena costilla izquierda, le laceró el hígado (lóbulo izquierdo), atravesó el pulmón, ingresó al corazón por el ventrículo izquierdo y salió por el derecho para alojarse en el saco del pericardio, ocasionándole la muerte por shock hipovolémico.

 Teniendo en cuenta las características violentas del hecho, la presencia de testigos jóvenes y menores de edad, y la pertenencia del imputado a una fuerza de seguridad, el fiscal Juan Pedro Puntel pidió la prisión preventiva por el plazo que dure la investigación preliminar (estimado en 4 meses).