La violencia en el
barrio Álvarez Guerrero parece no tener fin. Para los vecinos de esa zona de
Viedma se ha tornado habitual –desde hace ya un par de años- ver y sufrir
situaciones desagradables, como espectadores o víctimas.
Robos, peleas,
disparos, enfrentamientos, corridas y hasta quema de viviendas ocurren con
frecuencia en este barrio y la gente está cansada. Afirman que es un “barrio
dominado por los delincuentes”, aunque la mayoría del lugar es gente
trabajadora, como si hiciera falta aclararlo.
Anoche, martes, hubo
un enfrentamiento entre grupos antagónicos en el que resultó apuñalada una
joven, que tuvo que ser llevada de urgencia al hospital Zatti, donde tras las curaciones
pertinentes se corroboró que estaba fuera de peligro.
El antecedente más
inmediato a ello es el homicidio ocurrido el fin de semana, cuando fue
encontrado el cuerpo sin vida de Alberto Ñancucheo en lo que había sido un
atraco por el que hay imputadas tres personas.
Pero los vecinos del
lugar ven cada día hechos violentos, algunos incluso quieren irse del barrio
porque “no es un buen lugar para criar a mis hijos, no es seguro”. Solo algunos
pueden irse a otra zona de Viedma, la mayoría debe seguir ahí, donde –como relata
un vecino- “no se puede salir a comprar más allá de las 6 de la tarde porque se
vuelve tierra de nadie”.
Vecinos consultados
por este medio afirman que “la policía anda por el barrio, pero es poca, ve y
sabe lo que pasa pero siempre son pocos”.
19 noviembre 2024
Policiales