El verano ya está promediando, en 20 días comienza el
otoño y dos de las concesiones municipales de Viedma todavía no están
resueltas, pese a que ya hace un tiempo prolongado que debían haberse
normalizado, en tanto también restan definirse algunas otras, entre ellas dos
en el balneario El Cóndor.
La situación del bar del Centro Municipal de Cultura y del complejo La Balsa (también conocido como Sal y Fuego) aparece como compleja y hay culpas echadas entre la gestión de Foulkes-Francioni y la de Pedro Pesatti. Lo cierto es que ninguna de las dos administraciones ha sabido dejar una situación ordenada en primer término y ejecutar en tiempo y forma, en segundo lugar.
Bella Vista
Desde que se inició el proceso de llamado a licitación a
mediados de octubre de 2020 que el local gastronómico del Centro Cultural
permanece cerrado y a la espera de una resolución que defina la concesión. Se
preveía que en noviembre se iban a abrir los sobres y en diciembre estuviera
funcionando. Nada de eso ocurrió ante lo irregular que fue el año pasado debido
a la pandemia de Covid-19.
Se venció en octubre la concesión y había una cláusula
que decía que el concesionario debía entregar las llaves el día mismo que se
abrieran los sobres de la nueva licitación y eso hizo. Es decir, por este
motivo quedó cerrado todo el tiempo que duró la licitación que se demoró por
todo el tema de la pandemia.
La cooperadora del Centro Cultural administraba ese bien
municipal y se lo había dado a un privado que pagaba sólo 20.000 pesos por mes.
Y la municipalidad pagaba luz, gas,agua y cloacas.
En esa licitación hubo 8 oferentes. El pasado 8 de enero
la Comisión de Evaluación definió el ganador y se abrió el plazo de 10 días
hábiles para impugnaciones.
Hubo por lo menos 3 impugnaciones al proceso y todas fueron enviadas al Fiscal Municipal
para que dictamine. El Fiscal no objetó el proceso y consideró que estaba todo
en regla.
El expediente fue derivado a Pesattiquien desestimo
lasimpugnaciones, luego de leer la opinión del Fiscal y adjudicó, la semana
pasada, al ganador de la compulsa: Carlos Magliarelli, a quien le darán las
llaves y prevé dos meses de refacciones antes de abrir el local.
Deberá pagar un canon mensual de 50 mil pesos.
La Balsa
Finalmente y después de muchas situaciones que incluyeron
demandas judiciales, destrabaron el acuerdo con Linares y Sabatella, quienes
habían iniciado dos acciones legales por separado, en contra del último proceso
licitatorio en el que perdieron con Indelman, quedando sus ofertas en segundo y
tercer lugar.
La gestión Pesatti habría llegado a un acuerdo con
Ildeman y Linares que serviría para destrabar la situación, pero todo eso debe
ser refrendado en la Justicia y si bien ya hay fecha de estimación de apertura
del local –como ya la hubo antes y no ocurrió- desde el municipio esperan esa
definición legal.
El acuerdo consistió en que Linares y Sabbatella
desistieran de continuar con las dos presentaciones legales, y la
Municipalidad, a cambio, les prorrogaba la concesión de Al Reparo –en el
balneario El Cóndor- por 4 años más, con actualización del canon. El acuerdo se
firmó y con algunos ingredientes que fueron apareciendo.
Linares había construido un departamento arriba de la
estructura municipal, sin autorización. El acuerdo incluyó una cláusula
específica sobre ese bien, porque Linares pretendía hasta antes de la firma,
que se le reconociera el valor de lo invertido allí y ahora desiste de eso.
Los objetivos de la Municipalidad eran tener abierto Al
Reparo y poder abrir Sal y Fuego en abril o mayo.
El Barco
Cuando comenzó la gestión municipal de Pedro Pesatti este
local ya estaba concesionado. Fue un proceso realizado bajo la gestión de José
Luis Foulkes como intendente. Allí pasó a llamarse Roma Costero y es
actualmente el que mejor funciona y le quedan unos siete años de concesión
(tres, más la posibilidad de prórroga por cuatro años).
Esta gestión logró recuperar la oficina que la
concesionaria anterior, Patricia Querejeta, había construido. Recordemos que
Querejeta, además, había sub concesionado el lugar con la anuencia de la
Municipalidad, pero por fuera de lo que dice el pliego de concesiones. La
oficina que construyó se la compensaron con canon, así que la estructura pasó a
ser municipal.
No obstante, recién ahora el ejecutivo logró recuperar
ese espacio y lo va a utilizar para el funcionamiento del Ente de Turismo Municipal
que se está creando.
Los actuales concesionarios del restaurante, confitería y
bar, también tiene el derecho de explotación del kiosco.
Kiosco cultural
Antes de concluir la gestión Foulkes-Francioni, el
funcionario a cargo de las concesiones, Oscar Echeverría firmó antes de irse un
permiso provisorio de uso y explotación, por cuatro meses, para kiosco y
heladería, a nombre de Mario Fernández.
Fernández amplió sin autorización y fue intimado por la
nueva gestión municipal y no respondió hasta que le dijeron que iban a
derrumbar tal construcción y entonces entregó la llave a la Municipalidad que
decidió –efectivamente- derrumbar todo lo construido, lo que estaba y la
ampliación.
Surgió entonces el proyecto de dos escaparates (dos medios
container), uno para kiosco y otro para heladería. La Municipalidad hizo una
encuesta para definir la ubicación y tras ello se decidió erigirlo sobre el
río, a la altura de la construcción de material de los desagües pluvales. Los
dos escaparates se construirán sobre un muelle pequeño.
Entre esta semana y la que viene se licitaría solo la obra
del muelle, para el que se prevé una erogación de 2 millones de pesos o más.
Dos paradores en El Cóndor (en la arena)
El compromiso de la empresa que ganó la licitación era
entregar la obra el 15 de diciembre. Entregó uno solo y recién el 15 de
febrero. El que entregó está ubicado donde estaba Rancho Aparte, en la bajada
de Cailotto y el otro, a unos 300 metros del primero, hacia el lado del
pescadero.
Como no se llegaba con los plazos para licitar, llamaron
a concurso de ideas para dar permisos provisorios por 4 meses, desde el 15 de
diciembre hasta el 15 de abril.
Se presentaron 10 y se seleccionaron dos: Las Princesas y
Painé cervecería.
Cuando a fines de diciembre les dijeron que los plazos se
estiraban, Painé desistió y Las Princesas dijeron que sí, y abrieron en febrero,
pero por 10 días y pidieron que les reconozcan conexiones eléctricas. Hubo
denuncias cruzadas entre concesionarios y la Municipalidad y finalmente
quedaron los dos cerrados y se licitan en marzo y abril para abrir en mayo.
Wonca
Es un parador pequeño de madera, que tenía permisos
provisorios desde hace 10 años con renovaciones cada 4 meses.
Esta fue la última y se anunció desde el municipio que
habrá una licitación para marzo/abril con un parador más completo y moderno.
El Faro
El contrato conSteding había vencido en abril de 2020, de
modo que la Municipalidad tomó posesión en noviembre. Las condiciones edilicias
no estaban a la altura de las necesidades y se otorgó casi de emergencia al
único interesado, que lo mantuvo abierto y lo entregará nuevamente el 30 de
abril, ya que se prevé una nueva licitación entre marzo y abril.
Novedad para El Cóndor
Se concesionarán cinco escaparates para instalar como
parte del paseo integrador, entre la calesita y el patio de entrada a la
colonia. Serán para venta de artículos de playa, kiosco, etc.
El visitante podrá recorrer esos escaparates, pasar para
la galería de la terminal, luego las casitas de los primeros pobladores,
después el paseo de artesanos nuevo y, por último, el predio de la Fiesta del Mar
y del Acampante.
Sudestada (bajada de Picotto)
No tiene concesión ni permiso provisorio, pero abrió
igual en la temporada.
Desde el municipio piensan hacer un llamado a licitación,
pero se prevé una controversia, ya que el concesionario tiene reclamos porque
amplió y construyó.
Lobería:
El cámping se encuentra en construcción por parte de la
la Provincia con financiamiento nacional y lo licitarían cuando lo terminen las
obras.
En tanto, la confitería el carrito, estacionamiento y
baños deben licitarse porque tiene permiso provisorio que vence en abril.
26 abril 2024
Viedma