La presidenta de la Sociedad Rural de Viedma, Juliana Bugiolacchi, cuestionó la falta de políticas integrales para combatir la inseguridad tanto en la zona rural como en las ciudades.

En relación a un último hecho de abigeato conocido en la zona en el que los ladrones mataron una maca preñada y dejaron tirado el ternero muerto, la dirigente ruralista dijo que “a los productores le da lo mismo que no sea una vaca preñada o no, la realidad va más allá de eso, el problema es que la inseguridad está a flor de piel y no se hacen cosas para prevenir”.

“Lo que pasa en la ciudad es lo mismo que en el campo solo que por el lugar físico se siente más grave, por la soledad y el aislamiento. Cuando uno siente impotencia y no encuentra respuestas no se sabe cómo va a responder, recordemos que en todos los campos hay armas”, advirtió.

Agregó que “a nadie le importa lo que le tiene que importar, nos acostumbramos a que haya rejas, cámaras, seguridad privada. La gente es la responsable de tomar precauciones pero a quienes hemos elegido para que manejen el Estado deben darse cuenta de las preocupaciones que tenemos todos, en la ciudad como en la zona rural”.

“Es un problema complejo, a veces no se toma dimensión de cuál es el problema. Se va tomando como natural que no podamos andar con un celular en la calle, no dejar el auto abierto, echar siete llaves a la puerta de casa. El mensaje de la Justicia es que los delincuentes son víctimas de la sociedad y por eso tienen licencia de seguir delinquiendo. No tenemos derecho a resignarnos a vivir cada vez peor”, se quejó.

Sostuvo que el campo “es tierra de nadie. En algún momento parecía que las denuncias iban a parar a un cajón, hubo reuniones con  el procurador Jorge Crespo y se fueron modificando algunas cosas”.