Aguas Rionegrinas (ARSA) implementó el año pasado una moratoria que permitió regularizar la situación de más de 42.000 usuarios, generando un alivio para las familias y un importante ingreso económico para la empresa. Los fondos recuperados, que superaron los $1.000 millones, fueron reinvertidos para fortalecer la capacidad operativa de ARSA.
La moratoria no solo ayudó a los usuarios a ponerse al día con sus pagos, sino que también permitió a la empresa incorporar vehículos y maquinaria esencial para su funcionamiento. Entre las adquisiciones destacan camionetas, camiones cisterna, motocicletas y equipos especializados, herramientas que contribuyen a garantizar un servicio más eficiente. Según datos de la empresa, hacia fines de 2024, la recaudación creció un 75%, asegurando la sostenibilidad financiera de ARSA y posibilitando futuras inversiones en infraestructura y tecnología.
Una de las principales incorporaciones realizadas con estos fondos fue la compra de 23 nuevos equipos de bombeo. Estas electrobombas de pozo profundo, que demandaron una inversión de más de $42 millones, se distribuirán en localidades donde las perforaciones son la principal fuente de agua potable. La actualización de este equipamiento es clave para garantizar la continuidad y calidad del servicio en toda la provincia.
“La adquisición de estos equipos busca renovar, actualizar y reponer el equipamiento de las perforaciones, asegurando un suministro más constante y eficiente”, explicaron desde la empresa. Además, las electrobombas optimizan el funcionamiento de las perforaciones y reducen el riesgo de fallas que podrían afectar el servicio.
Estos nuevos equipos serán instalados de manera inmediata, especificó Arsa.
23 enero 2025
Río Negro