Con motivo del Día Mundial del Asma, que se conmemora este 6 de mayo, el Ministerio de Salud de Río Negro impulsa una serie de acciones orientadas a mejorar el diagnóstico, tratamiento y control de esta enfermedad respiratoria crónica, que afecta a personas de todas las edades. La jornada se enmarca en una campaña global organizada por la Iniciativa Global para el Asma (GINA), con el respaldo de la Organización Mundial de la Salud.

Según pudo saber este medio a partir de fuentes oficiales del área sanitaria, los esfuerzos se centran este año en reforzar la accesibilidad a tratamientos, garantizar el uso adecuado de la medicación e incrementar el acceso a estudios clave como la espirometría, una herramienta fundamental para confirmar el diagnóstico y hacer seguimiento clínico.

El asma bronquial es una enfermedad inflamatoria crónica de las vías aéreas, caracterizada por episodios de dificultad respiratoria, tos, opresión en el pecho y silbidos. Estos síntomas, que afectan en distintos grados y frecuencias a cada persona, suelen desencadenarse por factores como infecciones respiratorias, alérgenos ambientales, cambios de clima, estrés, ejercicio físico o incluso medicamentos.

A nivel global, se estima que 300 millones de personas viven con asma, y debido al avance de los procesos de urbanización, se proyecta que este número se incrementará en 100 millones hacia 2025. En Argentina, la enfermedad provoca más de 400 muertes al año y al menos 15.000 hospitalizaciones, según datos relevados por fuentes médicas del sistema público.

El lema de este año, centrado en los “Tratamientos Accesibles”, busca generar conciencia sobre la importancia de eliminar barreras al tratamiento y promover una atención más equitativa. Desde el sistema de salud provincial se hace énfasis en la educación de pacientes y familias para fomentar el automanejo de la enfermedad, la correcta aplicación de la medicación y la consulta médica temprana ante signos de alarma.

Especialistas consultados remarcan que el acceso a la espirometría en los hospitales y centros de salud es clave no solo para diagnosticar el asma, sino también para monitorear su evolución y ajustar los tratamientos de forma personalizada. Aunque no existe cura definitiva, el asma puede ser controlada si se detecta a tiempo y se siguen correctamente las pautas de tratamiento, lo que permite a quienes la padecen llevar una vida activa y plena.