Una tradicional receta comunitaria se transformó en un potente gesto de ayuda. La Asociación Española de Socorros Mutuos de Viedma confirmó la transferencia de $6.411.000 a la institución IREL de Bahía Blanca, luego de una exitosa venta de porciones de paella realizada el 13 de abril con fines solidarios. La iniciativa logró una convocatoria masiva y se concretó gracias al aporte de cientos de personas, comercios locales y entidades de la ciudad.

Según informaron desde la organización, los fondos serán destinados íntegramente a la rehabilitación de las instalaciones de IREL, una institución ubicada sobre la orilla del arroyo Maldonado que, como consecuencia del último temporal que afectó a Bahía Blanca y la zona, perdió todo su equipamiento de planta baja. “Sabemos que ayudamos a gente que ayuda”, manifestaron desde la Asociación, resaltando el trabajo que realiza el centro de rehabilitación, que hoy enfrenta una situación crítica.

El monto final de lo recaudado superó ampliamente las expectativas iniciales. Desde la Asociación explicaron que la cifra no fue un múltiplo exacto del valor de las porciones porque muchas personas transfirieron montos mayores, y otras compraron solidariamente aun sabiendo que no podrían retirar su comida. “Partimos de una suma de dinero muchísimo menor y, con trabajo y corazón, volviendo a los valores de ayuda mutua que tuvieron nuestros mayores, multiplicamos la cifra”, expresaron con satisfacción.

La organización agradeció especialmente a los comerciantes de Viedma que facilitaron los insumos sin aplicar sobreprecios, a quienes colaboraron anónimamente con el pago directo de facturas, y al Banco Credicoop, que ayudó a costear una parte de los mariscos. También reconocieron a las personas que colaboraron con la logística, la cocina y la difusión de la campaña. “A las manos que picaron, cortaron y cocinaron… a las manos que ayudaron con la logística… y sobre todo, a todas las personas que colaboraron difundiendo y comprando porciones”, resumieron.

La propuesta fue difundida con anticipación por redes sociales y canales de mensajería, convocando a colaborar con una transferencia de $15.000 por porción a la cuenta de la Asociación. Las entregas se realizaron en su sede de la calle Gallardo, con un operativo ágil que permitió despachar cientos de pedidos en pocas horas. La totalidad de lo recaudado fue destinada al objetivo planteado desde el primer momento: asistir a los y las damnificadas de Bahía Blanca.

IREL, Instituto de Rehabilitación de Bahía Blanca, brinda atención a personas que transitan procesos de recuperación física. La catástrofe climática que atravesó la ciudad el año pasado dejó a la institución con importantes pérdidas materiales, afectando directamente su funcionamiento. Desde Viedma, una comunidad entera se organizó para contribuir a su recuperación desde lo que mejor sabe hacer: cocinar para compartir.

“Estamos muy agradecidos”, concluyeron desde la Asociación Española, al tiempo que hicieron votos para que Bahía Blanca y las zonas aledañas “vuelvan a resplandecer”. La experiencia dejó abierta la posibilidad de repetir la fórmula solidaria en futuras ocasiones, reafirmando el espíritu de colaboración que caracteriza a la entidad centenaria.