Dicha atención apenas se limita a casos de urgencia, pacientes en riesgo, embarazadas y personas mayores. El resto debe abonar la prestación y luego reclamar el reintegro correspondiente en la obra social rionegrina.
La medida se adoptó a raíz de que los bioquímicos de Río Negro que prestan servicio a los afiliados del Ipross aseguran que tienen sus laboratorios desfinanciados para poder continuar con la atención de los afiliados de la obra social.
Carlos Ruff, conocido bioquímico de Viedma, relató que históricamente el Instituto mantenía una deuda de seis o siete meses con ese sector. “Para que tengan una idea actualmente hemos cobrado apenas el 50 por ciento de las prestaciones de diciembre del año pasado”, contó el profesional.
Agregó que "es imposible soportar tantos meses sin cobro teniendo que hacer frente a los insumos y compromisos que los laboratorios deben afrontar diariamente”.
Con referencia a las propuestas del IPROSS, sostuvo que son dilatorias y que hace por lo menos 25 años que sucede de la misma manera, aunque destacó que –pese a ello- continúa siendo una obra social muy importante.
22 noviembre 2024
Río Negro