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Ocultando sus verdaderas intenciones detrás de ese discurso pseudo moralista que nadie le compra, Piccinini no sólo le mintió descaradamente a la sociedad rionegrina durante todos estos años al frente de la Defensoría del Pueblo, sino que además lo sigue y seguirá haciendo, tomando como propia la forma de hacer política que pregona su nuevo jefe. Si bien la política es el arte de lo posible, es difícil entender cómo una radical de tantos años haya optado por transformarse en la abanderada y vocera de los postulados del peronismo derechoso representados por su nuevo o no tan nuevo socio.
No obstante, analizando la cuestión con la calma que se requiere, podemos encontrar muchas coincidencias entre estos dos dirigentes, a los que lo único que parece separarlos es la cuestión de género. Ahora, por fin, blanquearon su sociedad que busca amedrentar a los rionegrinos con sus mentiras y amenazas.
Lo importante es que todos y cada uno de los rionegrinos que siguen apostando por la democracia, conocen sus verdaderas intenciones, y les volverán a dar las espaldas como se merecen.
Leonardo BALLESTER
Intendente de Ingeniero Huergo
16 noviembre 2024
Opinion