A seis días de los enfrentamientos entre las hinchadas de Santos y Lavalle, una serie de diligencias judiciales y policiales se concretaron en la tarde de ayer. El objetivo fue capturar al supuesto agresor de los dos jóvenes heridos con proyectiles de bala 9 milímetros el día lunes.
Alrededor de las 19, móviles policiales comenzaron a ganar las calles del barrio para desplegarse y realizar una serie de allanamientos. Quien comandaba esos operativos fue el Juez del Juzgado de Instrucción Nº 4, Guillermo Bustamante que con una rápida investigación llegó a dar con el presunto agresor.
Luego de los sucesos desencadenados el día lunes, donde Millaguan y Tripailao terminaron internados en el nosocomio, uno de ellos con heridas graves en el maxilar y el otro en sus piernas,  la policía comenzó una investigación de oficio que prácticamente allanó el camino para los procedimientos realizados en la jornada de ayer.
Los agentes de la subcomisaría 76 se movieron, buscaron pruebas, trataron de aportar testigos y profundizaron las hipótesis del ataque mucho antes de que Millaguan brinde su declaración y aporte el nombre de su atacante.
Con la denuncia y la declaración, más la investigación de la policía, todo lo que quedaba por hacer era realizar allanamientos, cuestión que el juez Bustamante resolvió mucho antes de lo que cualquiera hubiese imaginado, considerando los antecedentes que vienen teniendo ambos Juzgados de Instrucción de Viedma.
El detenido estaba en su vivienda y fue sorprendido por la policía que lo capturo sobre la calle 19 y lo traslado a la Unidad 1 donde esperará a ser citado para brindar su declaración testimonial.

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