La perforación tendrá 80 cm de profundidad, 70 cm de ancho y una extensión de entre 4 y 6 Km cuando esté culminada. Hasta el momento, según informó Salemme, llevan cavados más de 3 Km y esperan terminarla en los próximos siete días. “Irá desde las 34 Hectáreas hasta el Frutillar, y la idea es llegar hasta los tanques del Departamento Provincial de Aguas”, explicó.

El funcionario aseguró que se trata de “una medida preventiva que en el Manso dio sus resultados y esperamos que aquí también”. Dijo que hasta hoy, ningún roedor cayó en ella, pero aclaró que hasta el momento no se registró el anunciado incremento de la población de ratas como consecuencia de la floración de la caña colihue.

Esta medida preventiva desnudó la imposibilidad de la comuna para realizar obras por cuenta propia, ya que hasta un trabajo de zanjeo debió ser tercerizado. “No tenemos la maquinaria necesaria (para ese tipo de trabajos) y con lo que tenemos estamos abocados a las tareas de saneo de la ciudad y retiro de arena de las calles”, aseveró.

Si bien el monto del trabajo obligaba a una licitación, desde el Tribunal de Contralor dieron el visto bueno a la contratación directa tras la presentación de tres presupuestos; aunque cuestionaron: “Ya se sabía hace tiempo lo del riesgo de ratada, y el Ejecutivo hizo lo mismo que ocurrió con el Plan Calor: no presenta el pliego y viene a último momento, cuando la situación es urgente, a pedirnos que le aprobemos el gasto”, afirmó Oscar Cannizaro, presidente del órgano. Se presentó NCC Construcciones, Zoco y Sergas, siendo esta última firma la del presupuesto más bajo. (ANB)