14 mayo 2012 Río Negro Comentar
"Consideramos a estos hechos como un atropello a la libertad individual, un desequilibrio político por parte de quienes tienen la enorme responsabilidad de gobernar para el pueblo rionegrino, y solo han demostrado con este tipo de actos lejanía absoluta, de aquellas promesas electorales en donde anunciaban transparencia y eficiencia en la toma de decisiones y acciones. Hoy cinco meses después de asumir, solo vemos una provincia sin rumbo ni acción, donde los trabajadores que día a día luchan por vivir mejor, son los más perjudicados: conviviendo con la persecución, porque no pueden ejercer el derecho a huelga, porque muchos son señalados por pertenecer al radicalismo y porque hoy se encuentran en un listado por elegir pertenecer a un partido político, que jamás ofreció un puesto de trabajo a cambio de una afiliación", dijeron.

"Es aberrante que este tipo de hechos se reproduzcan; claramente es un cachetazo a nuestra querida Democracia, una falta de respeto a los trabajadores rionegrinos, seres humanos que detrás tienen familias, hijos estudiantes, proyectos, sueños y anhelos. Señores funcionarios ¿Qué es lo que quieren lograr? ¿Hacia dónde pretenden llegar con este tipo de actos repudiables? Hoy cinco meses después seguimos con las mismas preguntas y ninguna respuesta", agregaron en un comunicado firmado por Nicolás Suárez Colman, referente del sector.

Dijeron que "sentimos indignación como militantes, y sobre todo como ciudadanos que creemos en una República, justa, libre y digna. Por eso nos comprometemos con la realidad injusta, llena de mezquindad, soberbia, atropellos, carente de respeto, que vive la sociedad rionegrina, nos solidarizamos con los trabajadores afectados porque consideramos que lo que le pasa a un rionegrino nos pasa a todos y le decimos a todo el gobierno del Frente para la Victoria, que no vamos a permitir que sigan realizando estos actos impunemente".

"Queremos decirles que ustedes son los servidores del pueblo rionegrino, y como tal deben estar al servicio del mismo, no son los dueños del Estado ni de la política. Ni mucho menos de los destinos
de cada trabajador", finalizaron.