A principios de esta semana la pequeña comunidad de Ramos Mexía se vio convulsionada cuando un nutrido grupo de vecinos llegó al municipio para reclamar trabajo, viviendas y mejores condiciones de vida. Según manifestaron los vecinos de "digital23" en reiteradas oportunidades había solicitado una entrevista con el intendente, que nunca lograron y en razón de ello se manifestaron frente el edificio municipal.

Luego, con la mediación del legislador Alejandro Marinao, pudieron dialogar con Giménez a quien le entregaron un petitorio. "Hoy el pueblo está muy mal. No hay trabajo ni futuro para nuestros hijos. Queremos que el gobierno municipal nos deje de mentir a nosotros y a la provincia. Acá no existe el lavadero de lana que tanto se promocionó, ni las viviendas para madres solteras, ni ninguna otra obra. Queremos transparencia en la gestión y en los destinos de los fondos municipales" detallaron.

Luego de volver a reunirse con los vecinos, Giménez señaló que "la necesidad de mi pueblo es real y desde mucho antes que pasara esto, he estado viajando frecuentemente a Viedma para acelerar el desembarco de obras comprometidas por el gobierno provincial a fin de generar los puestos de trabajo para la comunidad, cosa que estas dos personas que están saliendo por medios provinciales hoy critican y por lo tanto se contradicen".

A pesar de reconocer las necesidades de su pueblo, el jefe comunal atribuyó las manifestaciones de los vecinos a "un fallido intento de desestabilización, llevado a cabo por un par de individuos que se encargaron de generar un conflicto desde una problemática que tenemos los vecinos de Ramos Mexía como es la desocupación que estamos tratando de superar a meses de haber recibido un gobierno provincial desfinanciado y prácticamente quebrado. No me caben dudas que es así. Alcanza con analizar que las declaraciones en los medios comienzan mucho antes de solicitar una entrevista con el ejecutivo municipal. Uno puede ver en las imágenes, por ellos mismos generadas, que nunca se muestran vecinos en el reclamo, solo carteles y por último quienes conducen o agitan este reclamo son empleados públicos provinciales incorporados en gestiones de gobiernos anteriores".

El intendente calificó que "pseudodirigentes" a quienes encabezan el pedido y afirmó que están siendo repudiados por muchos vecinos que conocen la realidad y se sienten utilizados para lograr beneficios personales desde las necesidades de nuestro pueblo". Por otro lado y sin brindar nombres, afirmó la existencia de un impulso que personajes externos a la localidad le están dando a este reclamo, "lo que me da la certeza que en esta movida desestabilizadora, intervienen sectores que están en contra de la gestión de nuestro gobernador a fin de crear un conflicto que supere nuestros límites".

FUENTE: Digital23