Entre las medidas adoptadas se dispuso la derogación de la Instrucción Normativa Nº12, que impedía el ingreso de manzanas, peras y membrillos al país vecino por razones sanitarias.
El gobierno de Dilma Rousseff decidió levantar la prohición y se comprometió a "no aplicar restricciones de carácter sanitario y administrativo", lo que -según la Embajada argentina- garantizará la exportación de manzanas y peras y beneficiará a las regiones productoras de Mendoza y el Alto Valle (Río Negro y Neuquén).
A través de un comunicado, Kreckler destacó que el resultado "exitoso de esta negociación, llevada adelante por la Secretaría de Comercio, la Embajada Argentina en Brasil y el Ministerio de Agricultura, es fruto del compromiso al más alto nivel de ambos Gobiernos en jerarquizar los canales de diálogo en materia comercial y multiplicar la frecuencia de sus reuniones".
Antes de la aplicación de la norma, el mercado brasileño de manzanas representaba 63,5 millones de dólares y el de peras, 137,3 millones de dólares.Por otra parte, se acordó la apertura inmediata del mercado brasileño para los limones argentinos en aquellos estados libres de la plaga denominada "Cancro Cítrico", a saber: San Pablo, Minas Gerais, Río Grande do Sul, Paraná, Santa Catarina, entre otros.
Argentina exporta al mundo aproximadamente unas 300 mil toneladas de limones por un valor de 150 a 200 millones de dólares, y el resultado de esta negociación beneficiará a las provincias del NOA Argentino, principalmente a Tucumán, que detenta el 85% de la producción.
Brasil anticipó además que en los próximos meses también permitirá el ingreso de naranjas y mandarinas en términos que "buscarán preservar las condiciones sanitarias y comerciales de los cultivos de cítricos en la región", según detalló la embajada.
En ese rubro, Argentina exporta por 57 millones de dólares y las principales provincias productoras son Entre Ríos y Corrientes. (TELAM)