En una extensa entrevista brindada esta mañana a LU 19, el mandatario expresó que “los disturbios en Cipolletti y Viedma tienen los mismos patrones: muchos jóvenes en situación de vulnerabilidad social y sus líderes relacionados con vendedores de droga”. Agregó que en la capital provincial “comienza todo con el líder de una toma de un barrio, que se pone afuera de Changomás para exigir mercadería; se resuelve esa situación, pero unos 30 o 40 chicos de los barrios cercanos comienzan los enfrentamientos con la policía. Son pibes que se enfrentan con la policía todos los fines de semanas, no sólo ese día”.

En el caso de Bariloche “sabemos que se trató de una cuestión muy organizada y planificada. La Cooperativa 1º de Mayo forma parte del Frente de Organizaciones Populares (FOP), cuyos dos principales epicentros son Bariloche y Rosario. Los dos saqueos se iniciaron a la misma hora; esa fue la primera conexión. La segunda está relacionada con la presencia de un equipo de Todo Noticias (TN) en el Changomás a la misma hora que se produce el saqueo. Tercera conexión: el diario Clarín publica el jueves pasado que en los allanamientos se llevaron hasta las cajas que les habían regalado la Presidenta y le hacen un reportaje a una mujer. Esa mujer, a la que hacen aparecer como pobre y humilde, es una de las que encabezó el saqueo (está filmado)”.

“Obviamente que previo a todo se instaló el rumor de los saqueos y se repartieron tickets de una manera poco seria, ya que la distribución no llegó a todos los necesitados y hubo comercios que no los canjeaban”, acusó.

Dejó en claro que lo de Bariloche “no fue una convulsión social ni un problema similar al 2001. Los 19 vehículos secuestrados en 44 allanamientos son modelos posteriores al año 2002 (de organizadores o personas que fueron a robar). Alguien que tiene un vehículo así no está en situación de hambre, de desesperación de pobreza. Es un delincuente”.

“No creo que se pueda repetir, pero debemos ser firmes con la Justicia y la Policía para que quienes llevaron esto adelante paguen las consecuencias, porque si no estaríamos en lo mismo. Esto no es un robo o un daño, es –primero- una asociación ilícita y –segundo- robo en poblado y en banda”, afirmó Weretilneck.

Sobre la ausencia de datos previos a los desmanes, expresó que “nosotros sólo teníamos rumores y comentarios anteriores, pero no datos puntuales de lo que podía suceder. No lo sabíamos nosotros ni ninguna otra fuerza de inteligencia”.

No obstante, sostuvo el gobernador que “estoy convencido que si esto no hubiese sido organizado por las cooperativas 1º de Mayo o 17 de Junio (la de Bonefoi) no habría pasado nada”.
Remarcó que “no creo que haya existido una ‘mano’ política detrás, pero sí gremial. Se ven militantes de otros partidos. Yo nunca responsabilicé de la organización a la UCR, dije que había personajes famosos que participan del radicalismo de Bariloche en el lugar de los escenarios e integrantes del Sindicato de Comercio. Eso está documentado en filmaciones”.

Sobre la responsabilidad del intendente de Bariloche en los hechos del 20 de diciembre, opinó que “(Omar) Goye promociona e instala el tema de los saqueos, luego le exige a los supermercadistas que entreguen tickets y posteriormente se distribuyen de una forma poco técnica”.

“Además, en un programa de TV del domingo anterior se señala que los dos supermercados que no había colaborado eran Changomás y Diario, casualmente son los dos que se saquen primero. Lo más delicado fue instalar un tema que no era tal”, añadió.

Dijo también que el de Goye “es un gobierno muy débil, con fuertes cuestionamientos, con serios problemas de credibilidad, responsabilizado por la comunidad por estos hechos que han pasado, por lo que creo que debemos tener un diálogo sereno, maduro y adulto”.

Describió que “de por sí Bariloche es una ciudad compleja, difícil, no sólo por su problemática local, sino por lo que implica la llegada del turismo. Es totalmente distinta al resto de las rionegrinas, por lo que debe tener un tratamiento diferente. Por eso es que fui 15 veces en el año”.

“Bariloche no puede darse el lujo de tener un gobierno municipal débil, debe ser fuerte, apreciado y respetado por la gente”, sentenció.

Consideró Weretilneck que “el futuro de Goye lo debe definir el cuerpo político de Bariloche. Uno puede dar una opinión, pero no la voy a dar públicamente porque sería una intromisión. De todos modos creo que las cartas están jugadas: después de lo que sucedió nadie puede pensar de que esto no puede tener una consecuencia”.

También mencionó que la Presidenta de la Nación “estaba muy molesta, pero yo estoy dolido porque trabajamos todo el año para que todo sea normal y en la última semana del año -por impericia y negligencia- terminamos con una cuestión nacional y provincial inmerecida. Es lógica la bronca de la Presidenta”.

En defensa de la actuación policial

Por otra parte, Weretilneck admitió que la Policía no cuenta con elementos para hechos de esta dimensión, pero dejó a salvo a su personal. “La primera responsabilidad de las acciones policiales es el gobernador porque en términos constitucionales es el Jefe de la Policía”, aclaró.

Más adelante precisó que “para hechos ‘normales’ los efectivos cuentan con lo necesario (uniforme, arma reglamentaria, chaleco antibalas y un par de esposas), pero lo sucedido en Bariloche fu un tumulto. Para esos casos tienen prohibido utilizar armas de fuego cuando no está en peligro su vida, sobre todo cuando se presentan convulsiones sociales, gremiales o deportivas”.

“Si un policía tiene 70 o 100 personas atacándolo y no puede usar su arma de fuego ¿Cómo se va a defender? No es una falta de preparación, es un hecho totalmente raro y distinto. La enseñanza para nosotros es que tenemos que ampliar el grupo COER (ex BORA). Bariloche tiene 32 efectivos pertenecientes a esa agrupación, que ese día estaban en la cárcel porque teníamos datos de inteligencia de que íbamos a tener intentos de fugas masivas en toas las unidades penitenciarias de la provincia. Por eso tardaron una hora en llegar a Changomás, porque estaban dentro de la cárcel. En ese momento es que se ve al resto de los policías defendiéndose con las piedras y palos”, concluyó.

Otros temas

El gobernador Alberto Weretilneck consideró que el 2012 fue "un buen año" para el gobierno provincial. Según expresó, hubo varios objetivos trascendentales que se lograron cumplir, entre ellos "aprender a pasos agigantados el funcionamiento del Estado".

Según aseguró el mandatario el primer gran objetivo fue "salir del vacío" que produjo el asesinato del gobernador Carlos Soria. "Era la figura central del proyecto", detalló.

Luego recordó acciones que consideró sumamente importantes para la provincia: abrir el aeropuerto de Bariloche, "que haya cosecha y se lograra firmar la paritaria sin conflictos" y poner en marcha el sistema educativo, "que alcanzó los 190 días de clases".

"En julio sacamos a la provincia del déficit y no tuvimos que pedir más plata a la presidenta para pagar los sueldos".

"En términos generales, tuvimos un buen año. En el medio hay cuestiones estructurales, como la fruticultura. Si no fuera por lo que sucedió ahora en Bariloche, podemos decir que durante todo el año, Río Negro fue una provincia que fue para adelante".

A futuro, entre otros aspectos, planteó: "El 2013 va a ser de concreciones en la actividad petrolera".