Mendioroz aseguró “estoy conforme con la resolución que ratifico los precios mínimos establecidos en la última reunión de la mesa (7 de diciembre de 2012) fijados en 1,50 pesos para la fruta fresca y de 1 peso para la fruta de industria o su equivalente en dólar.

“La mesa  de ninguna manera podría haber avalado el precio expectativa que plantea el gobierno, ese precio no existe, no esta relacionado al costo de producción y seria ilegal hacerlo” manifestó Mendioroz.

“Las leyes vigentes son muy claras tanto la de transparencia como la de contractualizacion y establecen que el precio mínimo se determina en función de los costos de producción y deben figurar en el contrato para que los empresarios puedan acogerse a los beneficios fiscales. Si no se respetan los precios determinados deberán pagar el 100 % de los impuestos como cualquier hijo de buen vecino” explicó el presidente del bloque de la concertación.

Mendioroz señaló que “el gobierno insiste hoy al igual que lo hizo ayer en el proyecto de presupuesto 2013 en bajarle los impuestos a los empresarios y por otro lado dice no tener recursos para asistir a los pequeños y medianos productores: es un verdadero disparate”.

Las leyes vigentes en la provincia de Rio Negro “son un marco regulatorio de avanzada, que si todos, es decir gobierno, empresario y productores nos comprometiéramos en respetarlas daríamos un enorme avance en cuanto a la transparencia comercial del sector frutícola”.

Para finalizar Mendioroz rescató el fallo en primera instancia del Juez de la Cámara Civil y Comercial números 3 de Cipolletti, Marcelo Gutiérrez que le dio un firme respaldo a la normativa vigente al rechazar el planteo de inconstitucionalidad y los argumentos de la parte empresarial Ecofrut SA en el juicio contra la productora Norma Ramírez. Y recordó que la sentencia rescato como injustos los mecanismos que pretenden trasladar al productor primario el riesgo empresario emergente del mercado, es decir de los negocios y contratos celebrados luego de que el productor entrego su fruta haciendo recaer en exclusiva sobre el productor el posible saldo negativo o neutro del negocio, finalizó Mendioroz.