Por este motivo, siguiendo las conclusiones expuestas  en dichos informes, se está llevando a cabo el cómputo y presupuesto de la obra que deberá realizarse en el establecimiento.

La instalación general de estos talleres no posee puesta a tierra y las existentes, de los propios tableros, suelen ser precarias sin confiabilidad de los valores. Tampoco cuenta con la identificación de los circuitos, y las herramientas no tienen protección contra contactos indirectos.

Además, con la gravedad que esto representa, el tablero de maquinas de herramientas está ubicado debajo de un desagüe pluvial con deterioro, por lo que le cae agua. Este tablero no es del tipo estanco para poder soportar la situación planteada.

También,  hay precariedad en el sostén de los artefactos de iluminación, falta de disyuntores que permiten la protección en la alimentación de los equipos , cables libres sin aislamiento antes del ingreso a la ficha  y un tablero eléctrico con electricidad aun luego de cortar todos los circuitos en el tablero general.

Todas estas falencias que tiene el establecimiento, ya que las ampliaciones, modificaciones, cambios y mantenimiento realizados desde su creación fueron deficientes,  las adecuaciones fueron del tipo provisorias, y tal como lo identifica el perito enviado por la Justicia en su informe “la infinidad de malas prácticas en la instalación”, representan situaciones de riesgo directo e indirecto para las personas que realizan actividades en los talleres, así como también faltan al cumplimiento de la normativa vigente para instalaciones eléctricas de este tipo.

Es a partir de tomar conocimiento de esta situación,  que ambos Ministerios, deciden llevar a nuevo toda la instalación eléctrica de los talleres, brindándoles una solución definitiva a las autoridades, docentes, padres y alumnos del CET N°1.