Luego de 7 años la gestión de Weretilneck tiene sus marcadas características. Una de ellas es el rol ínfimo que adquiere el Secretario General de turno. Han pasado 4 funcionarios por el área desde que el cipoleño asumió en el cargo, pero el más “precario” es el actual. Nelson “Pocho” Cides llegó al despacho contiguo del Gobernador con el estandarte de la obsecuencia.

Es uno de los funcionarios que no puede hilvanar una frase sin nombrar de forma reiterada a “Alberto”, “el Gobernador” o “el jefe” según el interlocutor de turno. Una de sus principales misiones es perseguir a los ministros con “los pedidos de Weretilneck”. Así es como llegó a irritar a Nicolás Land con las demandas de subsidios a personas e instituciones.

Al comienzo de su gestión, “Pocho” confrontó con Luis Di Giacomo en su intento de oficiar de Coordinador de Gabinete. Fracasó fundamentalmente por la relación radial que mantiene el Gobernador con cada funcionario. Mantiene una sórdida batalla con la ministra Mónica Silva quien lo ignora directamente, obligando al propio Weretilneck a requerir personalmente las gestiones.

En ese escenario el Secretario General quedó reducido prácticamente a un rol de cadete. Así es como se dedicó a la poda de árboles de las “Casas Oficiales”. Tarea que ha resultado por demás onerosa para las arcas públicas rionegrinas.

Un claro ejemplo de ello es la aprobación de la Contratación Directa para la extracción de dos árboles que se encontraban en la vereda de una vivienda oficial ubicada en la calle Yrigoyen Nº 488, por la suma de 88.000 pesos. En esa dirección habitaba una vivienda oficial el ex secretario de Medios Guillermo Campetti. 

No conforme con eso la Secretaria General conducida por Cides también aprobó otra Contratación Directa para extraer un árbol del patio de una vivienda oficial ubicada en la calle Rivadavia Nº 784  por la suma de 75.000 pesos. En esa esquina pernocta el ministro de Gobierno, Luis Di Giacomo. Para sacar 3 árboles el bueno de Cides se comprometió a abonar 163.000 pesos, convirtiéndose en el costoso jardinero fiel de Weretilneck.