A partir de hoy, cancelar el pago mínimo de la tarjeta
de crédito en pesos y dejar el saldo para pagar en los meses siguientes será
más caro. Por una decisión del Banco Central, la tasa máxima que pueden cobrar
los bancos por ese financiamiento crecerá 5 puntos porcentuales, por lo que
pasará del 57% al 62% para todos los resúmenes de tarjeta cuyo monto no supere
los 200.000 pesos.
La medida, decidida el jueves pasado en la reunión de
Directorio del BCRA pero que comienza a tener efecto hoy, está ligada al fuerte
incremento que el BCRA decidió para la tasa de política monetaria, que la
semana pasada saltó de 52% al 60 por ciento. El alza en esa tasa de referencia
impacta sobre todo el sistema, encareciendo toda clase de créditos para
familias y empresas.
En el caso particular de las tarjetas de crédito, la
tasa máxima que el BCRA fija para el “interés compensatorio” tiene como
objetivo limitar el costo que los bancos cobran a sus clientes que quieren
financiarse una parte de lo gastado con sus plásticos. El constante avance de
la inflación obligó a elevar ese límite.
La norma de la entidad que preside Miguel Pesce
dispuso “sustituir, con vigencia a partir del ciclo de facturación
correspondiente a agosto de 2022, al 62% nominal anual el límite al interés
compensatorio para financiaciones vinculadas a tarjetas de crédito”.
Desde hoy también será más caro financiar con la
tarjeta de crédito los gastos en dólares, en el caso de que el resumen en
moneda extranjera supere el monto de USD 200 en el mes. Este aumento se
aplicará con otro mecanismo. Hasta ahora, cada vez que alguien hacía el pago
mínimo en dólares y decidía financiar el saldo, la tasa de interés máxima que
se le aplicaba era la misma que en pesos, es decir, un máximo de 57% (ahora
elevado al 62%).
El Central decidió que desde agosto se aplique otra
tasa que también tiene un tope, aunque bastante más alto. Se trata del límite
previsto en la ley de Tarjetas de Crédito. En esa norma, se dispone que la tasa
máxima “no podrá superar en más del 25% a la tasa que el emisor aplique a las
operaciones de préstamos personales”. Por ejemplo: si el banco cobrara 10% para
préstamos personales, no podrá cobrar más de 12,5% para financiar saldos de
tarjeta.
De esa forma, quienes gasten más de 200 dólares en el
mes dejarán de gozar de la ventaja de ese financiamiento más barato. En los
hechos, pasarán de pagar una tasa del 57% a una más alta del 83%, que según el
BCRA es lo que cobran en promedio los bancos.
Cabe destacar que esta decisión del BCRA no limita la
cantidad de dólares a gastar con la tarjeta sino que fija un interés más caro
para financiarse.
La tarjeta y el plan Ahora 12
El encarecimiento del costo de financiarse con la
tarjeta de crédito impactará sobre el consumo y se agrega a otro ingrediente
que muestra el mercado del dinero plástico: por el efecto de la inflación, los
planes de cuotas se están acortando. Para el consumidor argentino, se vuelve
cada vez más notorio que pagar en cuotas es conveniente únicamente cuando las
tasas se ubican debajo de la inflación. Las cadenas minoristas tampoco quieren
perder y modifican sus planes en forma constante.
22 noviembre 2024
Nacionales