La suba de tasas de interés de política monetaria que
fijó el Banco Central (BCRA) -de 69,5% a 75%- comenzará a regir a partir de
este viernes e impactará de manera inmediata en los depósitos a plazo fijo en
pesos, como una forma de evitar que la suba de precios afecte a los ahorristas.
Se trata de la tercera suba de tasas de interés que
aplica el BCRA en los últimos dos meses, luego de que el 28 de julio subiera
800 puntos la tasa de Leliq, que pasó de 52 a 60% anual, y el 11 de agosto se
fijara una suba de 950 puntos, para alcanzar el 69,5% anual.
El objetivo de la medida -explicó el Central- es
normalizar la estructura de tasas de interés activas y pasivas de la economía
para acercarlas a un terreno positivo en términos reales, que ayude a frenar la
inercia de precios y a consolidar la estabilidad financiera, cambiaria y la
acumulación de reservas internacionales alcanzada en las últimas semanas.
"En agosto la tasa de inflación nivel general y la
tasa de inflación núcleo mensuales se redujeron respecto a julio, aunque
sostuvieron un nivel elevado respecto a los meses previos. Debido a ello, el
BCRA considera necesario incrementar una vez más la tasa de política monetaria
y consolidar así el proceso de normalización de la estructura de tasas de interés
activas y pasivas de la economía para ubicarlas en un terreno positivo en
términos reales", explicó la autoridad monetaria en un comunicado.
Por ello, para "aumentar el incentivo al ahorro en
pesos", el BCRA elevó los límites mínimos de las tasas de interés sobre
los plazos fijos de personas humanas, estableciendo el nuevo piso en 75% anual
para las imposiciones a 30 días hasta 10 millones de pesos.
Esto representa un rendimiento de 107% en términos
efectivos anuales, mientras que el resto de los depósitos a plazo fijo del
sector privado (personas o empresas) tendrán una tasa mínima garantizada de
66,5%, lo que representa una tasa efectiva anual de 91%.
La suba de tasas forma parte la estrategia nueva
estrategia de política monetaria fijada por el BCRA, que busca establecer un
sendero de tasa de interés de política de manera de propender hacia retornos
reales positivos sobre las inversiones en moneda local y de preservar la
estabilidad monetaria y cambiaria.
"Al mismo tiempo, las nuevas tasas permitirán
consolidar la estabilidad cambiaria y financiera y potenciar la acumulación de
reservas internacionales", explicó el Central.
En ese sentido, detalló que futuros ajustes de tasas
estarás estrechamente vinculados con "la evolución pasada y prospectiva
del nivel general de precios y a la dinámica del mercado de cambios".
"Teniendo en cuenta los senderos esperados para la
base monetaria y el resto de los agregados monetarios, la política de tasas de
interés que lleva adelante el BCRA resulta consistente con una reducción del
stock de pasivos remunerados (Leliq, Notaliq y Pases) en términos del PIB
durante 2023", señaló el Central.
Después de que el miércoles el Indec diera a conocer el
índice de precios al consumidor de agosto, que ascendió hasta el 7%, se
descontaba que el BCRA volviera a subir la tasa de interés.
De hecho, en las últimas semanas está subiendo
crawling-peg del tipo de cambio oficial a un ritmo del 6,2% mensual, por encima
de la tasa efectiva de política monetaria que regía hasta el jueves de 5,8%.
A diferencia de anteriores oportunidades, la suba de
tasas definida el jueves se produce luego de que el Banco Central lograra una
fuerte acumulación de reservas internacionales, al comenzar a implementarse la
semana pasada el nuevo esquema de fomento a las exportaciones del complejo
sojero, que reconoce un tipo de cambio de $ 200 por cada dólar hasta el 30 de
septiembre próximo.
En la ronda del jueves, el Central pudo acumular compras
por US$ 300 millones y acumula compras por casi US$ 2.000 millones en las
últimas ocho jornadas y, a falta de 11 ruedas para cerrar el mes, se encamina a
superar holgadamente el mejor registro -desde que hay datos diarios- registrado
en diciembre de 2011, cuando había adquirió US$ 2.493 millones.
22 noviembre 2024
Nacionales