Según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en marzo los precios de los agroalimentos se multiplicaron por 3,4 veces desde el campo hasta la góndola. Esto significa que el consumidor pagó $3,4 por cada $1 que recibió el productor.

En promedio, la participación del productor en el precio final fue del 31,3%. La lechuga fue el producto con la mayor participación del productor, alcanzando el 76,6%, mientras que el zapallito registró la menor, con solo el 3,9%.

De acuerdo con el Índice de Ventas Minoristas de CAME, las ventas del sector alimentos y bebidas cayeron un 28,7% en los primeros tres meses del año comparado con el mismo período de 2023. Esta caída refleja la disminución del poder adquisitivo y la falta de convalidación de precios por parte del consumidor, indicando una reducción en la demanda.

Además, durante el primer trimestre, todos los eslabones de las cadenas de valor se vieron afectados en su rentabilidad debido a los fuertes incrementos de costos, incluyendo devaluación, transporte, logística, electricidad, gas, impuestos y combustibles, entre otros.

Brecha por Sectores

El mismo informe señala que en el IPOD frutihortícola, los precios de las 19 frutas y hortalizas que componen esta canasta se multiplicaron por 4,6 veces en marzo, mostrando una disminución del 6,5% respecto a febrero.

En el caso del IPOD ganadero, para los 5 productos y subproductos ganaderos, el consumidor pagó 3,1 veces más de lo que recibió el productor, lo que representa un aumento del 6,9% respecto al mes anterior.

Mayores brechas IPOD mensuales:

Zapallito (25,5 veces)

Ajo (19,3 veces)

Limón (10,5 veces)

Mandarina (9,1 veces)

Pera (5,8 veces)

Estos productos experimentaron una gran diferencia entre los precios de origen y destino, con variaciones en la oferta y demanda que afectaron sus precios tanto al productor como al consumidor.

Menores brechas IPOD mensuales:

Lechuga (1,3 veces)

Frutilla (1,5 veces)

Huevo (1,8 veces)

Repollo (1,9 veces)

Cebolla (1,9 veces)

Estos productos mostraron una menor diferencia en sus precios entre el campo y la góndola, con incrementos en los precios al productor y al consumidor debido a diferentes factores como las inclemencias climáticas y el sistema de producción integrado.