Días
después de que el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, anunciara en el programa de Alejandro Fantino que el puerto para la
planta de GNL será completamente privado, sin participación de
gremios, municipios ni cámaras empresariales, el gremio de los
petroleros salió a aclarar la situación de los puestos de
trabajo.
El Sindicato Unidos Petroleros e
Hidrocarburíferos (SUPeH) emitió un comunicado en el que expresa su
preocupación por las declaraciones del gobernador y recalca la
importancia de que los empleos generados por la planta de GNL sean
ocupados por trabajadores bajo su convenio sindical.
El secretario
general Juan Carlos Crespi y el administrativo Alejandro Fernández
firmaron el documento, subrayando que lucharán para garantizar que
la conducción del proyecto quede en manos de YPF y no de intereses
extranjeros.
El mega proyecto de la planta de GNL,
liderado por YPF en asociación con la empresa malaya Petronas,
despertó intensos debates y disputas sobre los beneficios y empleos
que generará. Inicialmente planificada para Bahía Blanca, la
ubicación de la planta ahora enfrenta una pulseada entre la
provincia de Buenos Aires y Río Negro.
En su comunicado,
SUPeH enfatizó que el proyecto debe emplear únicamente personal
bajo su convenio de trabajo, destacando la magnitud y los beneficios
del proyecto para el desarrollo energético del país. "Nos
sentimos obligados a realizar ciertas reflexiones que no pueden dejar
de tenerse en cuenta", comienza el documento, haciendo hincapié
en la necesidad de proteger los derechos laborales de los
trabajadores involucrados.
El gremio subraya que la planta
de GNL representa la inversión más importante en la historia de
Argentina, con un desembolso estimado en unos 40 mil millones de
dólares. Una vez operativa, se espera que Vaca Muerta se convierta
en uno de los principales proveedores de gas del mundo, garantizando
el abastecimiento interno y generando ingresos superiores a 20 mil
millones de dólares anuales a través de la exportación de GNL.
La
disputa por la ubicación de la planta generó tensiones políticas,
especialmente después de que el presidente Javier Milei sugiriera
que la planta podría instalarse en Río Negro, luego de que esta
provincia adhiriera rápidamente al Régimen de Incentivos para
Grandes Inversiones. En este contexto, el gobernador Weretilneck
aseguró que el puerto para la planta en Punta Colorada será
completamente privado, excluyendo a gremios y otras entidades de su
administración.
El SUPeH continuará vigilando de cerca
el avance del proyecto y participará en las discusiones necesarias
para asegurar que los intereses de los trabajadores sean tenidos en
cuenta, reiterando su compromiso con la defensa de los derechos
laborales y la promoción de empleos de calidad en la región.
26 noviembre 2024
Río Negro