Las ventas minoristas pymes descendieron 15,7% anual en julio, a precios constantes, y acumulan un declive del 17% en los primeros siete meses del año, según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). En comparación mensual desestacionalizada, las ventas se retrajeron 1,6%, reflejando las dificultades económicas que enfrentan estos comercios.
El principal problema de los comercios minoristas en julio fue la falta de ventas, seguido de los altos costos de producción. Las empresas demandan una reducción de impuestos nacionales, provinciales y municipales para recuperar la rentabilidad. Aunque los planes de financiamiento han dado cierto dinamismo al mercado, muchos consumidores son reacios a endeudarse, incluso con cuotas de interés bajo.
Todos los rubros medidos registraron bajas en la actividad de julio, siendo las más acentuadas en farmacias y perfumerías. En alimentos y bebidas, las ventas bajaron 20,9% anual y acumulan una caída del 21,7% en los primeros siete meses del año. Los consumidores han regulado sus compras, aprovechando ofertas y optando por marcas más económicas.
En el sector de bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles, las ventas disminuyeron 16,1% anual en julio, y llevan una caída del 17,5% en lo que va del año. Los consumidores consideran prescindibles la mayoría de estos productos, y las compras se orientaron a textiles para el hogar y pequeños artículos de bazar.
Las ventas de calzado y marroquinería descendieron 8,8% anual en julio, con una caída acumulada del 11,6% en el año. Los productos más afectados fueron los no esenciales o de lujo, mientras que el calzado escolar y de trabajo mantuvo cierta demanda. En farmacias, las ventas retrocedieron 26,4% anual, acumulando una disminución del 29,2% en el año. La venta de suplementos y medicamentos no esenciales se resintió notablemente.
El sector de perfumerías registró una caída del 32,6% anual, acumulando una baja del 32,5% en los primeros siete meses del año. La venta de productos como perfumes, cosméticos y maquillaje de marcas top fue especialmente baja. En ferretería, materiales eléctricos y de construcción, las ventas disminuyeron 11,1% en julio, con una caída acumulada del 19,1% en el año, aunque se observó un ligero aumento del 1% en la comparación mensual.
En el rubro textil e indumentaria, las ventas cayeron 3,8% anual en julio, pero aún acumulan un incremento del 3,7% en los primeros siete meses del año. Las liquidaciones masivas y la estabilidad de precios no fueron suficientes para incentivar el consumo.
El relevamiento de CAME también consultó a los encuestados sobre medidas que el Gobierno podría implementar para ayudar a las pymes. El 51% indicó la reducción de impuestos, el 15,5% sugirió bajar las tasas municipales y el 13,1% propuso estimular la demanda interna. La falta de ventas y los altos costos de producción fueron señalados como los principales obstáculos para los negocios. En respuesta a estos desafíos, el 34,3% de los comerciantes redujo gastos operativos, el 31,8% diversificó sus productos y el 10,5% recortó horas laborales en los últimos seis meses.
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) continúa monitoreando la situación de las pymes en el país, destacando la necesidad de políticas que apoyen la recuperación y el crecimiento del sector en un contexto económico complejo.
22 noviembre 2024
Nacionales