El Juzgado Federal con competencia electoral en Viedma desestimó una presentación realizada por La Libertad Avanza (LLA) y autorizó al partido "Primero Río Negro" a mantener el uso de su logo, que incluye la imagen de un león. Según el fallo, no existen elementos que puedan generar confusión en el electorado entre los símbolos de ambas agrupaciones.

La resolución fue dictada por el juez federal subrogante Gustavo Villanueva, quien analizó los elementos gráficos registrados por los dos partidos. El magistrado consideró que el logo de "Primero Río Negro" contiene componentes claramente diferenciados: un mapa de la provincia, el número 1 en el sector izquierdo, una cabeza de león en la parte derecha y el nombre del partido en su base.

La impugnación había sido presentada por LLA con el argumento de que la utilización del león por parte de Primero Río Negro podía inducir a error a los votantes, dado que ese animal ha sido asociado públicamente con el espacio liderado a nivel nacional por el presidente Javier Milei. No obstante, el tribunal desestimó esa interpretación.

Villanueva sostuvo que la ley electoral establece restricciones para evitar confusiones, pero aclaró que estas solo se aplican cuando los símbolos o nombres presentan similitudes sustanciales. En este caso, precisó que LLA tiene registrado un águila como emblema y no un león, lo que refuerza las diferencias visuales entre ambas identidades partidarias.

Además, el juez recordó que el logo de "Primero Río Negro" fue aprobado en la Asamblea Fundacional del 26 de marzo de 2024 y quedó registrado en el trámite de reconocimiento jurídico del partido. También indicó que la utilización de sus elementos debe hacerse de forma íntegra, sin desmembrar sus partes individuales.

Con este fallo, el partido provincial conserva plenamente su identidad visual, incluyendo el uso del león en su logotipo. Desde la conducción del espacio, su presidente Ariel Rivero destacó que fueron “los primeros y originales” en utilizar ese símbolo dentro del distrito.

La resolución sienta un precedente sobre los criterios con los que la Justicia evalúa la identidad visual de las agrupaciones políticas y refuerza la importancia de garantizar que los electores puedan identificar de manera clara a cada fuerza sin restricciones indebidas.