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Con el regreso a las aulas tras el receso invernal en la mayoría de las universidades nacionales, crece la incertidumbre sobre el funcionamiento de las instituciones en un contexto marcado por la falta de definiciones del Gobierno nacional. La preocupación que el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) manifestó públicamente a principios de julio se agudiza ahora ante la persistencia de los problemas presupuestarios, salariales y de funcionamiento que afectan al sistema universitario.
Según pudo reconstruir Diario La Palabra a partir de fuentes universitarias, el escenario que atraviesan las instituciones de educación superior sigue sin modificaciones sustanciales: no hubo avances en el diálogo con el Poder Ejecutivo, ni respuestas formales a la nota enviada por el CIN, que advertía sobre las dificultades para sostener el segundo tramo del ciclo académico 2024.
Una de las principales preocupaciones continúa siendo la pérdida de más de 10.000 docentes en lo que va del año, producto de la baja sostenida del salario real. Según señalaron desde el sistema universitario, muchos profesionales con trayectoria y formación se vieron forzados a abandonar sus cargos al no poder afrontar los gastos básicos con los haberes actuales, situación que impacta directamente en la calidad educativa. “En algunos casos ni siquiera alcanza para cubrir el transporte”, indicaron desde las casas de estudio.
Aunque en varios casos se designaron reemplazos para no interrumpir las clases, desde el CIN advierten que las soluciones improvisadas no compensan la pérdida de recursos humanos especializados, cuya formación requiere años. Además, se señaló que hay carreras nuevas en desarrollo que necesitan docentes para continuar su dictado y que no cuentan con financiamiento específico. Incluso, en algunas universidades se han suspendido transferencias previamente comprometidas para su implementación.
La situación salarial es otro de los puntos críticos. En una comunicación reciente, el propio Ministerio de Capital Humano reconoció una pérdida del 35% en el poder adquisitivo de los sueldos docentes y no docentes, pero hasta el momento no ha propuesto ninguna medida para revertir esa caída. Esta merma, remarcan desde el CIN, compromete seriamente la continuidad del segundo cuatrimestre.
A pesar de que el Ministerio admite contar con información detallada del personal universitario —incluyendo nombre y CUIT de cada agente—, desde el sistema aseguran que no ha habido avances concretos en el abordaje de las problemáticas estructurales. Este dato, insisten, evidencia la transparencia con la que operan las universidades públicas, en contraposición con versiones oficiales previas que señalaban la supuesta falta de información.
Otro punto que destaca el CIN es que, en el mismo comunicado oficial, el Gobierno estima los valores salariales para todo 2024 basándose en el Índice de Precios al Consumidor, lo que, en los hechos, representa una coincidencia con los criterios que promueve el proyecto de Ley de Financiamiento Universitario, dictaminado favorablemente en Diputados a comienzos de julio.
Las autoridades universitarias lamentaron que, en lugar de responder a través de los canales institucionales, la única reacción oficial haya sido mediante publicaciones en redes sociales. Aun así, desde el CIN reiteraron su disposición al diálogo y urgieron al Ejecutivo a generar instancias de trabajo conjunto que permitan garantizar el funcionamiento normal de las instituciones, que hoy sostienen la formación de más de 2,5 millones de estudiantes en todo el país.
El comienzo del segundo cuatrimestre, lejos de despejar las dudas, refuerza la preocupación por el futuro inmediato de la educación pública universitaria. Mientras tanto, docentes, estudiantes y autoridades esperan definiciones que aún no llegan.
3 diciembre 2025
Nacionales