Prescindibilidad y otros actos intimidatorios del actual gobierno

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Siempre los peronistas en el gobierno (cuando son oposición son distintos, ejemplo oro - cianuro) tuvieron una Ley de Prescindibilidad, cierto poco a casi nunca  aplicadas, pero que obran como un cuchillo en la garganta, si te mueves te degüella. Razones de servicios invocaron.
Los militares también tuvieran la suya, sujetos potenciales de perturbación invocaban.
Los radicales con el Dr. ALVAREZ GUERRERO no sólo las derogamos sino que reincorporamos con reconocimiento a los fines previsionales de los servicios fictos, a todos los perseguidos por la dictadura, la mayoría peronistas.
Otro desprecio por Viedma, casi insignificante comparado con los otros pero no menos dañino, es la amenaza de cortar el apoyo estatal para atender parcialmente ALIANZA VIEDMA. Nuestra ciudad capital  debe  recordarle al  Dr. SORIA que en la campaña dijo sería el mejor Intendente de Viedma, que cumpla lo prometido. Yo creo que si sigue así  no podrá cruzar sólo la Plaza San Martín a la Residencia, salir a cenar, sentarse en un café, etc. Está generando un odio innecesario, cuyo mayor afectado resultará él. Que lindo sería saludarlo sincera y cariñosamente  por ser nuestro mayoritariamente legitimado gobernador.
Que lamentable resulta el comportamiento obsecuente de los dirigentes peronistas por Viedma. Justifican todo. Nada cuestionan ni defienden por su ciudad.   Ejemplo: con la versión del traslado de Ministerios, contestaron que en Viedma está muy concentrado el Poder.   Su obsecuencia  no sólo los deteriora a ellos, también arrastran una lamentable imagen de  SORIA y de sus principales colaboradores, que quizás no la merezcan.

Estos días la incertidumbre nos  pega fuerte en todos los ámbitos.  Serán las peores fiestas de la Paz. Que lástima.
FELIZ NAVIDAD incluidos nuestros legítimos y actuales gobernantes. Necesitamos tratarnos con armonía y ayudarlos a sacar esta provincia en llamas producto de los desgobiernos radicales y radiKales de los últimos ocho años, soportando los esfuerzos necesarios que aunque sea por omisión muchos provocamos (me incluyo), pero sin soberbia y obsecuencia barata.

Juan Carlos ROSSO  L.E. Nº 8.119.126

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