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Los empelados han adherido en masa a las medidas dispuestas por el gremio del sector. Así, durante algunas jornadas dejaron de atender al público en un horario determinado para reunirse en asambleas, como forma de protesta ante la negativa de las empresas a aumentar sus salarios de acuerdo al pedido gremial.
El titular de La Bancaria en la zona, Rodolfo Cufré, admitió que la situación “es mejor que la semana anterior” porque “las cámaras empresariales han notado que la lucha de los trabajadores va en serio”.
“Ya está decidido que habrá medidas de fuerza, pero no sabemos cuando y no vamos a publicitarlo tampoco porque queremos que sean sorpresivas”, dijo Cufré, quien explicó además que de esta forma se evita el llamado a conciliación obligatoria.
Señaló que la banca privada “está más proclive a una solución” que el sector público.
El reclamo salarial de los bancarios tiene un objetivo central. “Hay una suma fija que se paga desde enero y que representa el porcentaje que los trabajadores queremos que se abone como suma remunerativa para que esté incluida en el salario del trabajador”, explicó.
Sin embargo, dijo que la oferta de patronal está cinco puntos abajo. “Ellos proponen el 18% contra el 23 o 24% que pedimos nosotros”, señaló.
Aseguró que la adhesión a la medida es muy importante en todas las seccionales y que “siempre hay presiones, pero represalias no”.
21 noviembre 2024
Gremiales