Los policías están sindicados como presuntos autores de la desaparición de Daniel Solano y llevan 11 meses presos. Según sus familias no hay pruebas en su contra y están siendo vulnerados sus derechos como ciudadanos, dado que no se sumaron a la causa nuevas pruebas que plantearían una nueva hipótesis. Además los policías piden ser trasladados alguna unidad del valle medio, algo que les habían prometido hace más de tres meses, cuando los familiares dieron su palabra de desarmar las carpas que habían montado en Viedma, hecho que fue realizado el día 21 de marzo.

Los familiares aclaran que no le temen al juicio, incluso indicaron, “no queremos que la causa caiga porque están en juego nuestros apellidos, queremos que el juicio se realice y que se limpien los nombres de nuestras familias.”

Según indican las familias, esta huelga de hambre surgió a raíz de que la justicia se niega a darles un trato justo dado que manifiestan “llevamos 11 meses luchando para que realmente puedan verse las prueba que han puesto nuestros abogados de que ellos son inocente y vemos que de parte de la jueza no hemos tenido ninguna respuesta positiva a lo que se ha planteado.  La jueza nos argumenta que quiere elevar a juicio con lo que tiene, pero que no queremos que se eleve a juicio, porque vemos que con este video que quiere presentar nuestro abogado, se puede tomar por otro camino la investigación. Ella nos dice que en su momento hubo pruebas, pero vemos que desde el comienzo de la causa hasta el día de hoy, todo dio negativo, la ecosport, el auto, el ADN, todo lo que se puso en la causa fue negativo y hoy todavía siguen detenidos ellos” manifestó la esposa de uno de los detenidos.

En tanto que la mujer de otro de los policía indicó “nosotros le comentamos la decisión de la jueza, que quiere elevar la causa a juicio sin tomar en cuenta las pruebas, entonces, como medida extrema ellos decidieron realizar una huelga de hambre, porque nosotros necesitamos que nos respondan. Además no es solo esto, porque  hace 11 meses que ellos están detenidos y nosotros estamos pidiendo un acercamiento hacia la familia, porque nosotros tenemos niños que sufren porque sus padres no están cerca, la movilidad dado que hacemos 600 kilómetros todos los fines de semana, es muy difícil estar tan alejados de la familia, nosotros lo que pedimos es que vengan cerca, que es lo que se nos prometió cuando pusimos la carpa en Viedma, y hace tres meses que se levantó porque nos prometieron que los chicos iban a estar más cerca y hace tres meses que nos dieron su palabra y seguimos sin respuesta. O sea que esta medida no es solamente para que la jueza investigue las pruebas que se presentaron, sino que también es para el acercamiento a sus familias. Nosotros queremos saber que derechos humanos tienen nuestras familias”

Por otra parte los familiares indicaron que los policías están hacinados “de la manera que ellos están hoy por hoy, es complicado, por eso nosotros queremos que estén más cerca, para que ellos puedan estar en contacto con sus hijos.”

Además manifestaron que acudieron a la oficina de derechos humanos en Choele Choel pero que hace un mes y medio que esperan una audiencia, “yo me acerque hablar con el chico de Derechos humano y el me dijo que me llamaba para hacer una audiencia y ya paso un mes y medio y todavía no tengo respuesta hasta el momento.”

Los familiares indicaron que los policías mantendrán la medida hasta que reciban una repuesta favorable.

FUENTE: Hoy Valle Medio