Se trata de Juan Pablo Cañumil, Alfredo Cañumil y Miguel Guacarán en relación a los hechos calificados como “amenazas agravadas por el uso de arma de fuego, en concurso real con abuso de arma y en concurso real con portación de arma de fuego de uso condicional sin la debida autorización legal” y puso a disposición del Servicio Penitenciario Provincial los detenidos a los fines que proceda a alojarlos en la unidad policial, que estime corresponda.

El Dr. Igoldi destacó que “los hechos atribuidos a los nombrados han implicado el desarrollo de conductas violentas, sumamente peligrosas para la seguridad de los ciudadanos del Barrio Guido de Viedma, actuando ellos como verdaderos dueños de la vida y seguridad (se manejaron en la vía pública durante varias horas esgrimiendo impunemente un arma de fuego de guerra).”

Respecto de la prisión preventiva señaló que “a este desprecio por las personas -a quien, como ya he dicho, les efectuaron disparos con el arma de fuego e intimidaron- se le suma la capacidad tenida para burlar el accionar de la policía provincial, a quienes lograron, por un momento, ocultar el arma de fuego Magnun 357, lo que evidencia la intención de perjudicar la investigación.”

El Juez sostuvo que “no es menos importante el desprecio por la autoridad constituida -para el caso el personal policial- ante el cual y ante su intervención, dijeron que el conflicto desatado aquella noche lo resolverían ellos, omitiendo identificarse.”

Por otra parte consignó,  “resta aún producir en autos prueba testimonial (entre ellas el testimonio de una de las víctimas), lo que evidencia la necesidad de aventar cualquier tipo de riesgo hacia ellos (riesgos que vivieron al momento de los hechos).”

Se informó que por separado,  el Juzgado continúa con la investigación que tiene otros involucrados, en lo referido a las agresiones sufridas por los policías y a los sucesos en la  Comisaría , la noche de los hechos.