Torres afirma que el homenaje al “Negro” Fontenla responde al trabajo social y humano realizado en la Escuela Rural Nº 211 del Paraje “La Cuesta del Ternero”, y a su gran labor comunitaria realizada durante 28 años en esta localidad, que “fue más allá de la docencia”.

Según el legislador, en los pueblos pequeños el rol del docente “se transforma, se jerarquiza, debe tomar decisiones en torno a lo que considere mejor para la comunidad, debe gestionar y denunciar”. En este sentido, recuerda cuando el maestro dio a conocer a los medios nacionales sobre el homicidio de una anciana aborigen, “la abuela Lucinda”, con la finalidad de que se esclarezca el crimen.

Expresa a su vez que un docente rural se constituye en una herramienta fundamental para cubrir las más variadas necesidades de los pobladores, como cuando utilizaba su Ford Falcón para llevar a los pobladores al pueblo a comprar mercaderías, remedios o realizar trámites, o cuando “costeó de su propio bolsillo el importe de la casilla de correo, donde recibía la correspondencia de todas las familias de sus alumnos, debido a los escasos recursos económicos de los pobladores del lugar”, relata.

Torres cuenta que otra faceta de Fontenla fue su larga trayectoria en el medio radial. “Desde su llegada, se volcó a la producción y conducción de distintos programas radiales, muchos dedicados a la difusión de la cultura rockera”. Además, participó en la gestión y creación de la FM Radio de la Tierra de La Cuesta del Ternero, así como también de la red de comunicación campesina, siendo co-conductor del programa “Auka Liwen”, que se difundió en las radios comunitarias de la zona cordillerana.

El legislador destaca además la participación del maestro en la Asociación Civil Alas, como miembro activo hasta el momento de su fallecimiento.

Fontenla nació en Capital Federal en 1952, y se instaló en este Paraje en 1984. Murió en 2012 en la ciudad de Buenos Aires.