El sindicato cuestiona el mecanismo elegido por el Intendente, Patricio Colil, para evaluar las necesidades salariales del personal de la comuna, teniendo en cuenta que “no existe un ámbito de participación de los trabajadores, y que de manera autoritaria, los incrementos se otorgan por decreto u ordenanza”.

Señalaron que “el referido municipio abona sueldos que se encuentran muy por debajo del Salario Mínimo, Vital y Móvil(SM,V yM) que rige a nivel nacional. Se puede comprobar mediante los recibos de haberes que en promedio los sueldos municipales en la localidad no superan los $3.800 y se abonan, casi en su totalidad, en negro y a través de sumas no remunerativas”.

"Hasta aquí hemos realizado todos los esfuerzos por construir una ámbito de diálogo, pero el autoritarismo que tiene este Intendente lo ha impedido. Además de ser ínfimo el aumento, Colil ni siquiera lo comunicó oficialmente a los trabajadores. Nadie puede aceptar una suma miserable de $400 y esto afecta gravemente a todos los empleados" manifestó energicamente Aldo Capretti, Secretario Adjunto de ATE Río Negro, y concluyó: "Si no existe un cambio en la metodología de la actual gestión comunal, nos encaminaremos a un seguro conflicto. Tenemos varias demandas que deben ser atendidas".

Preocupa a ATE también, la aplicación de un plan de achique y ajuste por parte del Poder Ejecutivo local. “Es que Colil también ordenó, durante los últimos días, vulnerando leyes laborales esenciales, la baja de categorías a gran parte del recurso humano y puso fin a varios contratos de empleados que cumplían tareas esenciales para la comunidad”, sindicaron.

Por último, el gremio indicó que en los próximos días serán convocadas distintas asambleas y en ellas se evaluarán medidas de fuerza concretas.