Damian Miler, secretario general de la CGT Zona Atlántica cuestionó la reunión que la gobernadora Arabela Carreras y el ministro de Trabajo Jorge Stopiello mantuvieron con Rubén Belich, titular de la CGT del Alto Valle (autodenominada Río Negro) aunque reconoció que la mandataria y sus funcionarios pueden reunirse con quien quieran.

“Me sorprende que se nombre a la CGT Alto Valle o Río Negro, cuando no existe. La gobernadora tiene todo el derecho de hacerlo, pero sorprende que se esté reconociendo una sola CGT en Río Negro que en realidad no existe en términos legales”, afirmó el dirigente de la construcción.

Sostuvo que “en este momento están funcionando dos, la del Alto Valle está cerrada, ni como regional funciona. La secretaria del Interior de la CGT debe dar la autorización”, sostuvo.

Insistió con que “la gobernadora y Stopiello fueron a una CGT que no existe. Sabemos que a nivel nacional está la intención de ir normalizando cada una de las regionales pero hasta el momento no está en el calendario. La Andina y la Atlántica, en cambio, siempre estuvieron normalizadas, aunque en algún momento se habían vencido los mandatos”.

Reiteró que la mandataria “se puede reunir con los sindicatos que desee, pero no utilizar el nombre CGT. La gobernadora no tiene por qué saberlo”.

Por otro lado, confirmó que días atrás pidieron al ministro Stopiello que gestione un encuentro con Carreras que se prevé para el mes de octubre, en conjunto las regionales Atlántica y Andina.

“Hay muchos temas de interés de los trabajadores en agenda para plantearle a la gobernadora. Como trabajadores de Río Negro, tenemos problemas con la inflación, la pobreza, la desigualdad, con la falta de oportunidades, un montón de temas estructurales y transversales a todos los ciudadanos del país”, agregó.

Resaltó que “nucleamos a 20 mil trabajadores en la región y queremos tener una agenda que nos permita abordar estos temas”, concluyó.