Los empleados que integran la Junta son dos, elegidos por el voto directo de los agentes pertenecientes al Poder Legislativo provincial y sus mandatos duran un año. Los restantes integrantes pertenecen a la patronal y son designados por el Presidente de la Legislatura.

Gatica fundamentó la idea al mencionar que este tipo de nominación por parte de un gremio “ya se utiliza en la mayoría de los sectores y puntos del país”. “Sin ir más lejos, esto sucede en el Poder Ejecutivo rionegrino”, acotó.

Al hacer referencia a la mejoría que podría producirse en el funcionamiento de la Junta, sostuvo que “los trabajadores nos aseguraríamos que nuestros representantes tengan cabal conocimiento de todos los procesos administrativos necesarios para defender nuestros derechos y actuar con justicia en casa caso en particular”.

En ese sentido dijo que “la forma más genuina de asegurar esa defensa –mediante un trabajo conjunto y simultáneo- es teniendo el respaldo y la apoyatura del gremio que oficialmente nos representa, en este caso APEL”.

“Nuestro sindicato está conformado por dirigentes con una amplia experiencia en el terreno laboral en general, y legislativo en particular; además de contar con el asesoramiento permanente de diferentes profesionales contratados a tal fin”, aseguró Gatica.

Más adelante hizo hincapié en el interés que APEL demuestra por todas las áreas de la Legislatura, ya que “siempre hemos presentado candidatos para todos los escalafones, y no para uno sólo, como hacen otros sectores que se oponen permanentemente a nuestro trabajo y ‘ningunean’ a los compañeros de Servicios y Maestranza, por ejemplo”.

“Recategorizaciones para los amigos”

El actual representante de los trabajadores en el escalafón Administrativo y Técnico (dentro de la Junta), quien ganó las elecciones del año pasado, responde a un sector opositor a la conducción de APEL.

Con su aval, en abril de este año se recategorizó a una docena de empleados legislativos que habían ingresado recién en el año 2011 a planta permanente. Algunos de ellos ya habían sido beneficiados con mejores categorías en el 2013. Incluso existen dictámenes legales que realizan abogados que –paralelamente- están beneficiados con mejores categorías.

“Significa que estos personajes han obtenido en cinco años más ascensos (cuatro o cinco categorías) que la mayoría del personal que hace más de 30 años está trabajando en la Legislatura”, sostuvo Gatica con indignación.

Añadió que “al conocerse esta situación –hace pocos días- se generó una gran indignación en todo el Poder Legislativo. Más aún a nosotros mismos, que tuvimos que descubrirlo de esta manera”.

“Lo peor para APEL es que los trabajadores nos culpan por no haberlo evitado, cuando ni siquiera estábamos enterados”, reconoció el dirigente.

Fue allí cuando mencionó que “esta es una de las razones para proponer que los representantes de los trabajadores en la Junta deben ser personas vinculadas al gremio, para que no vuelva a ocurrir esto”. “Cuando hay posibilidad de recategorizaciones debe ser para todo el mundo, como lo hacemos siempre, y no para unos pocos amigos”, sentenció.

Otro argumento que citó Gatica para fundamentar la propuesta de APEL es: “¿Si la patronal puede designar a sus representantes en la Junta, por qué los trabajadores tenemos que estar todos los años revalidando a nuestra gente mediante una elección?”.