Integrantes del Departamento de Salud en la Escuela destacaron
el fallo judicial que le permitirá a la docente Marina Espinoza, participar de
las asambleas para acceder a un cargo, derecho que le fuera arrebatado por un
dictamen desfavorable de la Junta Médica, luego de desempeñarse como profesora de Turismo en la ESRN 20,
durante nueve meses.
“La compañera fue separada de su cargo el 11 de noviembre de
2017, sin que mediara explicación alguna de la patronal, solo la resolución del
“No Apto” de la Junta, por una disminución auditiva que la misma docente había
declarado y que no le impedía desarrollar su tarea, tal como lo demuestra la
validación como sobresaliente, emitida desde la institución y el reconocimiento
de sus estudiantes y compañerxs de trabajo. A partir de ese momento, se le
impidió tomar cargos, y desde la Coordinación de Salud Escolar a cargo de Ana
Lía Soriano, se rechazaron, sistemáticamente, las presentaciones
administrativas correspondientes”, resaltaron.
Agregaron que “frente
a este avasallamiento de derechos y esta actitud discriminatoria de lxs
funcionarios de salud, se iniciaron las acciones legales correspondientes, en
un trabajo articulado entre la compañera Marina, asesorada legalmente por UnTER
junto con la Delegada de Salud en la Escuela Zona Andina, Andrea Roncati y la
Secretaria de Salud en la Escuela, Claudia Asencio, quien a su vez realizó las
presentaciones en reuniones con el Ministerio de Educación y Derechos Humanos,
además de los requerimientos en sucesivos encuentro paritarios”.
El dictamen de la
Justicia de habilitar la feria judicial, en enero de este año, “fue el primer
paso para demostrar lo arbitrario de la decisión del Ministerio y la certeza
expuesta por UnTER, cuando denunció que se estaba tergiversando el objetivo del
examen preocupacional, cuya única
finalidad debía ser la prevención y la protección de la salud de lxs trabajadorxs,
sin embargo desde el gobierno se transformó en una herramienta para coartar el
derecho constitucional a trabajar”.
Para el Departamente de Salud en la Escuela de UnTER, “la
restitución del derecho de la compañera Marina Espinoza de participar de las asambleas
de cargos para acceder a trabajar en igualdad de condiciones, sienta un
precedente fundamental, que permite continuar las acciones para que ningún
docente pierda su puesto laboral, por definiciones caprichosas de funcionarixs
más preocupados en recortar presupuesto, que en garantizar el acceso al trabajo
y a la educación del pueblo. Confirma, además, la convicción que la resignación
no es una opción para UnTER, cuando se
trata de defender los derechos del conjunto”.

29 diciembre 2025
Gremiales