La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) se manifestó en contra de la restitución del Impuesto a las Ganancias en los salarios de los trabajadores del sector salud de Río Negro. Según estimaciones del sindicato, alrededor de 600 empleados, entre médicos y especialistas que operan en los 37 hospitales provinciales, se ven perjudicados por esta medida.

Carolina Suárez, secretaria general de ATE en Allen, afirmó que "la restitución de este tributo perjudica de manera irreparable los ingresos de los trabajadores de la salud". Además, destacó que resulta paradójico que quienes sostienen el sistema sanitario a través de largas jornadas sean castigados con este tipo de impuestos.

El sindicato advierte que su aplicación contribuye a agravar la crisis en el sector de salud pública, afectando especialmente a profesionales con jornadas laborales extendidas debido a la escasez de personal especializado. Como resultado, existe una creciente preocupación por una potencial migración de trabajadores hacia el sector privado.

ATE también exige la eliminación inmediata del Impuesto a las Ganancias para los empleados estatales, alegando que "el salario no es ganancia, es ingreso de la familia trabajadora". Según Suárez, el gobierno debería centrar sus esfuerzos recaudatorios en sectores con mayores recursos, como las grandes empresas exportadoras, las extensiones ociosas de tierra, la minería, la industria petrolera y los casinos.

El gremio remarcó que los salarios de los trabajadores apenas cubren la canasta básica alimentaria y que, en comparación con administraciones anteriores, el mínimo no imponible se encuentra mucho más cercano al nivel de ingresos de los trabajadores, exacerbando la situación económica de las familias.