La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) convocó a un paro nacional con movilización hacia Plaza de Mayo el próximo 26 de septiembre. La medida, respaldada por más de mil delegados, se toma ante la amenaza de una nueva ola de despidos masivos a fin de mes en el ámbito estatal.

Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE Nacional, sostuvo que el Gobierno continúa con su política de ajuste y despidos, lo que agrava la situación de los trabajadores del sector público. “Tenemos que pasar de la resistencia al ataque para evitar nuevas cesantías masivas a fin de mes", afirmó Aguiar, resaltando que la acción gremial ha sido clave para visibilizar el descontento de los estatales.

La movilización responde también al pedido del presidente Javier Milei a los gobernadores para que ajusten 60 mil millones de dólares en sus distritos. Según Aguiar, este ajuste impactará de manera profunda en las provincias y municipios, empobreciendo a miles de trabajadores estatales. ATE planea continuar convocando a una máxima unidad de todos los sectores para enfrentar estas políticas.

El paro incluirá cese de tareas, retiro de los lugares de trabajo a partir del mediodía y una olla popular frente a la Casa Rosada. Además, cada provincia definirá la modalidad de protesta que mejor se adapte a su situación particular.

Con contratos estatales renovados solo por tres meses, el riesgo de despidos masivos afecta a más de 65 mil trabajadores. ATE también ha iniciado acciones judiciales para impugnar artículos de la Ley Bases que permiten despidos en la planta permanente, en un contexto donde el empleo estatal ha sufrido una caída significativa desde noviembre de 2023.