Por legisladoras rionegrinas*
Hace unos días, durante el foro económico de DAVOS, el presidente Milei volvió a arremeter contra los movimientos progresistas, el feminismo y hasta los organismos internacionales. En un patético intento de alinearse con la ultraderecha internacional, y de imitar a Donald Trump, el presidente esbozó un violento y retrógrado discurso lleno de odio y mentiras.
Dentro de sus lamentables expresiones, atacó a las diversidades sexuales, negó la brecha de género y hasta vinculó a la homosexualidad con la pedofilia.
Estas acciones estigmatizantes, no son un hecho aislado. Forman parte de una serie de embestidas que el gobierno impulsa con celeridad desde los primeros días de haber asumido. Desde el desmantelamiento de las políticas con perspectivas de género, el desfinanciamiento de los programas que promueven la igualdad de derechos, los recortes en salud sexual reproductiva y hasta el vaciamiento del Ministerio de la Mujer constituyen solo algunas de la enorme cantidad de derechos que pretende arrebatar la derecha gobernante.
Bajo este espectro de falacias y discursos cargados de odio, subyace un claro lineamiento conservador e ideológico que busca socavar enormes avances sociales logrados en base a la lucha y organización de multiplicidad de movimientos sociales, trans-feministas y de derechos humanos en nuestro continente y a nivel global.
Como una nueva fase de un plan cuidadosamente calculado, el gobierno de la “libertad” pretende avanzar sobre conquistas sociales que se han materializado en leyes de avanzada y en donde Argentina fue pionera en haber sancionado este tipo de normas.
Amparándose en decadentes afirmaciones, el ministro de justicia de la Nación Mariano Cúneo Libarona, anuncia que el Poder Ejecutivo enviará al Congreso una serie de proyectos, entre los que se mencionan la erradicación de la figura penal de femicidio, la eliminación del DNI no binario y los cupos de inclusión de personas trans.
Ante estas repudiables y nefastas acciones, deseamos expresar nuestro más enérgico y absoluto rechazo. En un país, donde sólo en el último año, una mujer fue asesinada cada 29 horas no puede haber lugar para especulaciones y para teorías negacionistas sobre la violencia estructural y sistemática que padecen, de forma diaria, las mujeres y las diversidades en Argentina.
Aunque pretendan convertir el odio y la discriminación en una política de estado, aunque nos persigan y nos intenten silenciar, no vamos a retroceder ni un centímetro en cada derecho conquistado. Resistiremos hasta las últimas consecuencias para impedir que la misoginia, la homofobia y la discriminación avancen en un país donde a fuerza de lucha y organización construimos derechos y sembramos memoria.
No vamos a claudicar, ni a renunciar a nuestro compromiso por construir un país más justo para todos y todas.
¡No pasarán!
*Ayelén Spósito y Magdalena Odarda (VcT)
*Ana Marks (PJ-NE)
*Maricel Cévoli (JSRN)
*Lorena Matzen (UCR)
14 enero 2025
Opinion