El secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, expresó su “absoluto repudio” a la agresión que sufrió el periodista Roberto Navarro en la vía pública, y advirtió que este tipo de hechos no son aislados, sino parte de un clima de violencia institucional que —según afirmó— se ejerce “desde las más altas esferas del poder”. A través de un comunicado difundido este lunes, el dirigente gremial subrayó además la necesidad de no naturalizar los ataques que ponen en riesgo la libertad de expresión en el país.
La reacción de Aguiar se conoció pocas horas después de que se confirmara la violenta agresión contra el director de El Destape. El ataque se produjo mientras Navarro caminaba por el centro porteño, cuando una persona que aún no fue identificada lo golpeó con fuerza en la cabeza, por la espalda y sin mediar palabra. Pese a la gravedad del hecho, el periodista logró trasladarse por sus propios medios a una clínica, donde fue atendido y se encuentra fuera de peligro.
El titular de ATE subrayó que “hoy la violencia en la Argentina es institucional” y enmarcó el ataque a Navarro en un contexto en el que —según sus palabras— “se ejerce desde las más altas esferas del poder”, poniendo en alerta sobre el clima de hostilidad que afecta particularmente a periodistas y trabajadores de prensa. “No podemos naturalizar los ataques a la libertad de expresión en democracia”, enfatizó Aguiar, quien consideró que el hecho debe ser repudiado sin matices.
El ataque contra el director de El Destape se produjo un día después de que el presidente Javier Milei publicara en redes sociales un mensaje en el que alentó a sus seguidores a “odiar más” a periodistas, lo que generó preocupación en amplios sectores por su posible vinculación con discursos de odio dirigidos a quienes critican al gobierno. Organizaciones sindicales, sociales y de derechos humanos manifestaron su preocupación por el contexto en el que ocurrió la agresión y reclamaron garantías para el libre ejercicio de la labor periodística.
El hecho también motivó expresiones de solidaridad y repudio de dirigentes políticos de distintas fuerzas. El diputado Alejandro Vilca escribió en la red social X que la agresión fue “cobarde” y transmitió su respaldo al periodista, mientras que la legisladora Myriam Bregman y otros referentes de la política se sumaron a las muestras de apoyo. Desde distintos sectores del periodismo también se advirtió sobre los riesgos que implica la difusión de mensajes que estigmatizan o criminalizan a quienes trabajan en medios de comunicación.
La investigación para identificar al autor del ataque sigue en curso, mientras el caso profundiza la preocupación sobre la seguridad de los y las periodistas en la Argentina y reabre el debate sobre la responsabilidad institucional en la promoción o tolerancia de discursos que alientan la violencia contra trabajadores de prensa y la libertad de expresión.
13 mayo 2025
Gremiales