Esta mañana en FM de la Costa dio a conocer la situación la secretaria Adjunta del gremio estatal, Marcela Galindo, aunque su reclamo fue apoyado por un importante número de trabajadores que posteriormente se comunicaron con éste y otros medios de comunicación.
Señalaron que ya hace varios meses que intentan mantener un encuentro con las máximas autoridades del Poder Ejecutivo y no obtienen ninguna respuesta.
Por otra parte, tampoco se interesaron en la cuestión los concejales, ya que aseguraron desde ATE haber enviado notas a todos los bloques para interiorizarlos del conflicto, sin obtener ningún tipo de repercusión.
“Si bien somos empleados municipales, tenemos responsabilidades y horarios muy diferentes al resto”, sostuvo Galindo al describir que trabajan siete horas por día y seis días a la semana. Los horarios son rotativos, lo que les impide poder encarar otro empleo para mejorar sus ingresos.
Admitió que pudieron mantener conversaciones con los responsables del área de Recursos Humanos del hospital, pero “no llegamos nunca a un acuerdo porque no escuchan nuestros reclamos”.
Agregó que el principal planteo es “una inmediata recomposición salarial” y mencionó que “el Sindicato de Trabajadores Municipales se llena la boca diciendo que consiguió aumentos, pero esos porcentajes serían significativos en haberes que cubran –como mínimo- la canasta familiar. Nosotros estamos muy por debajo del índice de pobreza”.
Dijo en ese sentido que el último incremento “fue del 5 por ciento, lo que en algunos de nuestros salarios implica la irrisoria suma de 20 pesos, ya que la mayor parte de nuestro sueldo está compuesto de sumas en negro”.
Galindo sostuvo que el reclamo es de la mayor parte de los más de 300 empleados que se desempeñan en las áreas de Enfermería, Mucamas, Mantenimiento y Administración del hospital Pedro Ecay.
En otro orden, cuestionó la forma en que se implementan las licencias y el pago de las horas trabajadas durante los fines de semana. Galindo mencionó gran cantidad de cuestiones que tienen que ver con sus ingresos y los elementos de tareas para poder desempeñarse correctamente.
Consultada acerca de los pasos a seguir en este reclamo, adelantó que están decididos a “llegar a las medidas de fuerza si es necesario. No vamos a seguir esperando. Yo soy mucama del hospital, con 24 años de antigüedad y mi sueldo de bolsillo es de 2.500 pesos. Como el mío son casi todos los salarios”.