Tanto el Subsecretario de Desarrollo Económico, Cesar Martirena, como el Director de Producción, Fernando Spoth, destacaron la tarea coordinada y la comunión de puntos de vista entre las instituciones participantes de este programa (ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de Nación, municipio y APSAPA), a la hora de establecer los criterios de selección de los beneficiarios.

Martirena comentó que “es un programa sencillo de explicar, pero que requiere de una intensa coordinación entre las instituciones que participan, así como la responsabilidad absoluta de los productores beneficiarios. Este programa piloto, sumamente favorable para los productores, seguramente recibirá una inyección de dinero extra si la evaluación ex-post resulta positiva”.

Ampliando los detalles del programa, Martirena comentó que el mismo consiste en la entrega, por parte de APSAPA, de módulos de 20 terneras cada uno, entre 180 y 200 kilogramos aproximadamente, a productores, para convertirlas en vaquillonas. En un plazo máximo de un año deberán alcanzar un peso mínimo de 300 kg cada una.

El productor obtiene la propiedad de 7 vaquillonas al finalizar el ciclo. Las 13 restantes son inseminadas y seleccionadas por APSAPA y vendidas en un remate público; con un incremento importante de valor agregado. Con el producto de la venta de estas vaquillonas, con garantía de preñez y seleccionadas y/o registradas en el caso que sea posible, se comprarán nuevamente terneras para asegurar la rotación de los fondos.

Por su parte, el Director de Producción, Fernando Spoth, comentó que “los requisitos para ser beneficiarios de un módulo son los siguientes: 1. Estar inscripto y haber ejecutado el Plan Ganadero Provincial desde el periodo 2010-2011. De esta manera se asegura la existencia de un veterinario profesional pago por el Estado en el establecimiento receptor de la hacienda. 2. Haber saldado las deudas de los fondos rotatorios de avena y suplementación estratégica. 3. No haber recibido ovejas de la UEDE ni porcinos del ministerio de Asuntos Agrarios. 4. Tener disponibilidad forrajera e infraestructura predial apta evaluada por el profesional a cargo del programa. 5. Tendrán prioridad aquellos que tengan menos de 100 vacas de cría según primera acta de vacunación 2012”.